Travesuras matrimoniales
El teatro El Nacional propone la comedia Dos más dos, en la que dos matrimonios de profesionales de clase media deciden experimentar un intercambio de parejas sin imaginar cuál será el resultado de esa audaz propuesta. Un tema tan osado como es la práctica del wife swapping ha sido muy poco difundido públicamente. El recuerdo más lejano es el de la canción Change Partners ( Cambien de pareja), que compuso Irving Berlin en 1938 para la película Carefree ( Baila conmigo), en la que Fred Astaire en el papel de un psiquiatra somete a un tratamiento hipnótico a la novia de un amigo (Ginger Rogers) y finalmente se queda con ella. Cabe aclarar que el título de la canción se refería a cambiar solo por unos minutos de compañero de baile. En realidad, el tema del intercambio de parejas con fines sexuales fue tratado más detalladamente en 1969 en la película de Paul Mazursky Bob & Carol & Ted & Alice, con el cuarteto formado por Natalie Wood, Robert Culp, Elliott Gould y Dyan Cannon. La idea de la pareja protagonista de intercambiar sexo con sus mejores amigos se origina a partir de que el marido, que es documentalista, concurre a una sesión de terapia de grupo con su esposa y luego desarrolla elaboradas teorías para convencer a la otra pareja que acepte la propuesta.
Hablando ahora de la vida real, hubo en Nueva York un club de swingers llamado Plato’s Retreat, inaugurado en 1977, que permaneció abierto hasta 1984 y en el que sus socios disponían de instalaciones adecuadas para concurrir con sus parejas y conocer otras parejas dispuestas a compartir una cama. Las reglas eran estrictas en cuanto a admitir solo parejas heterosexuales. El club funcionaba en el legendario Hotel Ansonia, en Broadway y la Avenida Amsterdam, que entre otras curiosidades, cuando se inauguró, tuvo una granja en la azotea (que fue rápidamente desmantelada) y alojó en 1968 a los baños turcos Continental, que ofrecían al público (mayormente gay) shows de artistas populares o desconocidos, como Bette Midler, que luego se hicieron famosos. Precisamente, cuando los dueños decidieron clausurar los baños Continental, sus instalaciones, que incluían piscina, sauna, cabinas, escenario y pista de baile, fueron adaptadas para crear el club Plato’s Retreat destinado a una corriente de público muy distinta. El club no tuvo una vida muy larga. Fue clausurado el 31 de diciembre de 1984 alegando que no cumplía ciertas normas sanitarias.