TODO QUEDO COMO ESTABA
Con un gol salvador del cuestionado Ousmane Dembélé, el Barcelona, líder de la Liga española, arrancó un 1-1 agónico ayer contra el Atlético de Madrid y conservó su primera plaza, aumentando la ventaja sobre el Real Madrid, que fue goleado por 3-0 en Eibar. Lionel Messi fue titular y armó la dupla de delanteros junto con Luis Suárez.
El Atlético de Madrid pensó que había hecho lo más difícil en el choque de la 13ª jornada: abrió el marcador con un cabezazo de Diego Costa tras un córner de Antoine Griezmann.
Pero Ousmane Dembélé, que entró en el minuto 80, se redimió a los ojos de sus compañeros tras sus recientes problemas de disciplina, marcando de un disparo raso entre un bosque de piernas cuando apenas faltaba un minuto para que terminara el partido.
Este quinto gol del campeón del mundo francés esta temporada en Liga permite al Barça (primero con 25 puntos) conservar el liderazgo delante del Atlético (2º, 24 puntos) y el Sevilla FC (3º, 23 puntos), que puede quedar en primer lugar mañana contra el Valladolid (10º).
El Barcelona saca ahora cinco unidades al Real Madrid (6º, 20 puntos), que concedió su primera derrota bajo las órdenes de su nuevo entrenador, Santiago Solari, con una actuación mediocre del capitán Sergio Ramos.