Máxima fue parte del G20 y habló de empoderamiento
Se estipuló que sería un evento que serviría para exhibir el compromiso del Grupo de los 20 líderes para empoderar mejor a las mujeres en el empleo, la economía y la educación. Pero solamente dos de los “líderes mundiales” en escena fueron mujeres: Theresa May la primera ministra británica “con fecha de caducidad”, y la canciller alemana Angela Merkel. La paridad en esos ámbitos también en una conquista a lograr. Titulado como “Evento Especial sobre el Empoderamiento de las Mujeres, ellas fueron las dos representantes de su género. Aún así, en ese ámbito se reiteraron el sábado un reconocimiento compartido de que “la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres son esenciales para lograr una sociedad inclusiva y sostenible y un crecimiento económico.” Una frase muy bien construida, pero que debería tener su correlato fáctico.
Fuera de los líderes también sumaron en la reunión a Ivanka Trump en calidad de asesora principal de la Casa Blanca, y a la reina Máxima como, según los fundamentos de la inclusión en ese grupo, son dos personas que están alineadas en la defensa y mejora de los derechos de las mujeres. Cuando le tocó hablar a Ivanka, ella destacó a los popes anfitriones por acelerar esfuerzos para elevar el talento de las mujeres, “uno de los recursos más infravalorados del mundo”. Y sumó que el empoderamiento femenino no solo es un problema de justicia social sino también de “política económica”. Y citó una estimación de que la participación de las mujeres en la fuerza laboral a un nivel igual de los hombres aumentaría el producto interno bruto anual global en US$ 28 millones en 2025. Máxima por su parte adhirió y en un panel que compartió con el polémico príncipe saudí Mohammed bin Salman habló sobre su experiencia en el trabajo y seguimiento de programas de microcréditos a mujeres de bajos recursos.
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