Fiebre ‘Breaking Bad’
Se dice que Twitter es una red perimida, que fue superada por otras donde lo visual ocupa mayor preponderancia, pero hay que ver cómo repercute lo que se dice en el espacio del pajarito. El martes, tanto Bryan Cranston como Aaron Paul publicaron, en simultáneo, el mismo tuit. En él el texto indicaba “soon” (pronto), y la imagen era la de dos burros con el desierto de fondo. De forma automática, se tomaron los mensajes como un primer avance publicitario de lo que será la anunciada película de Breaking Bad, y la ansiedad escaló a niveles estratosféricos.
En noviembre ya se había sabido que Vince Gilligan, creador y guionista de la ya clásica serie sobre el narcotráfico, preparaba un film que ocurriría después de lo presentado en el final de la última temporada. Cabe recordar que el personaje de Jesse Pinkman (Paul) finalizaba siendo liberado de su secestro gracias a Walter White (Cranston), quien sufría una herida apa
rentemente mortal en el laboratorio, mientras el joven huía en un automóvil. Todo indicaba, entonces, que el telefilm que se estrenará en Netflix (donde además se presenta la precuela de Breaking Bad, Better Call Saul) se centrará en la figura de Jesse y en qué ocurre con él tras el escape, y cómo se toman los carteles de la droga la noticia de que uno de los mejores fabricantes se mantenga con vida. Sin embargo, el hecho de que Cranston participara de la movida publicitaria permitió inferir que su Walter White también estará presente, de una forma u otra (¿sobrevivió?, ¿está a modo de recuerdos?, ¿es una especie de fantasma?).
Entre los personajes que podrían aparecer en el film, titulado de momento Greenbriar (es decir, aquellos que no murieron), están los de Skyler (Anna Gunn), esposa de Walter White, y el abogado Saul Goodman (Bob Odenkirk), de quien se poseen más datos porque en Better Call Saul se dan pantallazos de su paradero posterior.