Piden justicia por el crimen de Benjamín
Los restos del niño de 4 años que fue hallado colgado de un puente en el municipio tucumano de Las Talitas, al noroeste de la capital provincial, fueron sepultados ayer, en medio de un pedido de justicia por parte de familiares y vecinos.
Ulises Benjamín Amaya fue inhumado en el cementerio municipal y acompañaron a la familia gran cantidad de vecinos y otros allegados, entre ellos muchos niños pequeños que eran sus amigos del barrio.
Durante la ceremonia, los presentes reclamaron “Justicia por Benja”, como lo llamaban sus seres queridos, ya que hasta esta tarde no se había producido ninguna detención en relación con el homicidio, que causó conmoción en la provincia de Tucumán.
Este viernes, después de la autopsia, la Justicia entregó los restos del menor a la familia, que decidió velarlo en su propia vivienda, situada en el barrio El Colmenar.
Según el informe preliminar, el chico “no fue violado”, pero se esperan otros informes para determinar “si hubo algún otro tipo de abuso”, informó a la agencia Télam un vocero judicial.
El nene “estaba vivo cuando fue colgado del puente y su muerte se produjo por asfixia”, precisó la fuente.
El fiscal de homicidios, Alejandro López Isla, descartó que el pequeño se hubiera quitado la vida. Los investigadores regresaron a la escena del crimen, situada en Circunvalación y el Canal Norte, a 500 metros de la casa donde vivía el menor, e interrogaron a familiares, allegados a la familia y vecinos de la zona.
También peritaron la ropa que llevaba puesta y los elementos encontrados en el lugar.
El niño desapareció el jueves por la tarde, cuando estaba al cuidado de su abuela. n