Atacó a mazazos y palazos al juez que se negó a devolverle el auto
Fuera de sí y armado con un palo, una pala y una maza, un hombre atacó a un juez cordobés y a su mujer, en el marco de los festejos del cumpleaños de esta última, y dejó a ambos con graves lesiones, informaron ayer fuentes judiciales.
Si bien el final de esta historia se remite a la noche del viernes, cuando se materializó la brutal agresión, en realidad comenzó hace dos meses.
En ese entonces, a Ramón Senegas se le incautó el auto con el que trabajaba no solo porque se le detectó alcohol en sangre durante una inspección de rutina llevada a cabo por numerarios de la Policía de Tránsito, sino porque también tenía inconvenientes en los papeles del vehículo.
En calidad de demorado, fue trasladado a una dependencia pero allí logró alejarse de los funcionarios policiales, llegar hasta su coche, que estaba estacionado en el patio de la seccional, y escapar en él. Sin embargo, fue capturado horas después.
Debido a su grave accionar pasó varias semanas tras las rejas y, si bien recuperó la libertad, no consiguió que le devolvieran el auto, ya que continuaban las irregularidades con el papeleo, que no consiguió solucionar.
Una fuerte pelea con su pareja habría sido la gota que rebasó el vaso y, luego de la discusión, agarró una moto de su propiedad y al carro que llevaba enganchando le cargó una maza, un palo y una pala.
Con todo eso se dirigió a la casa de Claudio Gómez (54), el juez de Competencias Múltiples de la localidad de Corral de Bustos que le venía negando una y otra vez la devolución de su vehículo, y ganó el interior tras reventar la puerta a mazazos.
Una vez adentro, atacó al magistrado con el palo y la pala, mientras que su señora, que festejaba su cumpleaños junto con otros familiares, también recibió severos golpes al intentar detener la paliza, cuyos signos quedaron registrados en los pisos y las paredes de la vivienda, cubiertos de sangre.
El hombre terminó con “al menos cinco cortes en la cabeza que debieron ser suturados”, de acuerdo a un vocero, y con un traumatismo de cráneo, por lo que tuvieron que internarlo en el hospital de Villa María, mientras que ella sufrió una fractura en el antebrazo izquierdo y en uno de sus dedos.
Pese a la brutalidad del incidente, ambos se encuentran fuera de peligro y se recuperan de manera favorable.
Luego del hecho, el implicado se retiró del lugar y se entregó finalmente en una comisaría local.
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