El opositor Mesa denuncia fraude y pide mantener las manifestaciones callejeras
Evo Morales invitó ayer a los cancilleres de Argentina, Brasil, Colombia y Estados Unidos a visitar el país para hacer una auditoría de los votos de la elección del domingo pasado y señaló que, si se comprueba que hubo fraude, convocará a una segunda vuelta.
El rival de Morales, Carlos Mesa, anunció por su parte que no reconoce los resultados oficiales del Tribunal Supremo Electoral (TSE), denunció fraude y convocó a una “movilización ciudadana permanente”.
“Invito a los cancilleres de Argentina, Brasil, Colombia y Estados Unidos que vengan, hagamos una auditoría voto por voto, mesa por mesa, alcaldía por alcaldía, departamento por departamento y si hay fraude, al día siguiente convocamos a la segunda vuelta”, dijo el presidente durante un acto en la ciudad de Cochabamba.
En otro acto, en un cuartel militar antinarcóticos en el Chapare, su cuna política, Morales, quien ayer cumplió 60 años, exigió a quienes cuestionan su triunfo para un nuevo período 2020-2025 que demuestren el presunto fraude.
“No ocultamos, no mentimos. Menos pensar en fraude, y tampoco presentan pruebas. Todo es mentira y mentira”, dijo.
Protestas. Las protestas se suceden en Bolivia desde que el lunes pasado unos resultados preliminares publicados por el órgano electoral auguraron de repente una victoria de Morales en primera vuelta, cuando el día anterior apuntaban a una segunda ronda con Mesa.
Según los datos publicados el viernes por el tribunal electoral, Morales obtuvo el 47,08% de los votos, frente al 36,51 de Mesa.
Como la ley prevé que si un candidato supera el 40% y tiene una ventaja superior a los diez puntos sobre su rival es elegido, el presidente lo logró por apenas 0,57 puntos.
Ayer, Mesa, candidato de la alianza opositora Comunidad Ciudadana, aseguró que hubo fraude en el escrutinio e invitó a secundar los “paros, marchas, cabildos, concentraciones, cacerolazos y toda otra forma de protesta pacífica y democrática”.
Miles de personas continuaban manifestando en las calles de las principales ciudades, con barricadas en las intersecciones viales obstruidas con banderas, cuerdas, automóviles atravesados en la vía u otros objetos, para impedir el tránsito vehicular y el desplazamiento de personas.
Las protestas en La Paz estaban localizadas principalmente en la zona sur donde están asentadas las residencias de las clases media y alta.
En el área urbana de Santa Cruz, centro neurálgico de las protestas, miles de personas desbordaban los supermercados para comprar víveres ante la decisión del comité regional de mantener una huelga indefinida lanzada el miércoles.
Evo invitó a los cancilleres de Argentina, Brasil y Colombia a contar los votos