Alarmas delatoras
En la película La odisea de los giles, de Sebastián Borensztein, el plan elaborado por un grupo de personas que han sido estafadas por un banco para recuperar su dinero enfrenta el mayor desafío, que es desactivar una sofisticada alarma colocada en la bóveda donde ha sido escondido el dinero. En ese contexto, en un momento de la trama se hace una alusión a la película Cómo robar un millón de dólares, de William Wyler, en la que el personaje de la hija de un falsificador de obras de arte, encarnado por Audrey Hepburn, y un ladrón (Peter O’Toole) tropiezan con el mismo problema al tratar de robar una réplica de una estatua de Benvenuto Cellini exhibida en el museo KléberLafayette de París.
Hubo varios antecedentes en el cine de intentos de evitar que una alarma funcionara para perpetrar un robo, pero los más recordados ocurren en dos películas de Jules Dassin (Rififi y Topkapi), filmadas en la época en que ese director norteamericano fue incluido en las listas negras del macartismo y tuvo que continuar su carrera en Europa.
Rififi fue rodada en París en 1955 y narra un robo a la joyería Mappin & Webb cometido a través de un ingenioso plan, que incluía la perforación del cielorraso con la recolección de los escombros en un paraguas invertido, el descenso de los cuatro delincuentes hacia la superficie, la anulación de la alarma y la violación de la caja fuerte. Toda esa operación demora aproximadamente treinta minutos y no incluye diálogos ni música, lo cual contribuye a captar la atención de los espectadores y transmitirles una sensación de suspenso. Las alhajas auténticas que aparecen en la pantalla, aportadas por el joyero Jean Dusausoy, fueron custodiadas por la policía durante la filmación. La película le valió a Dassin el premio del Festival de Cannes de ese año, fue muy elogiada por la crítica y convocó numerosos espectadores en todo el mundo. La contracara de ese éxito fue que en algunos países, como México, el film fue retirado de la cartelera por haberse producido allí robos similares al del argumento.
Topkapi muestra el intento de robar un puñal y su estuche, cubiertos de piedras preciosas, del museo de ese nombre en la ciudad de Estambul. Un atleta miembro de la banda comandada por una bella mujer (Melina Mercouri) logra entrar por una ventana y colgarse desde allí para levantar la vitrina de cristal donde se exhibe la daga y así evitar que suene la alarma, y el plan se malogra cuando un pájaro se introduce en el lugar por esa misma ventana. La película redituó importantes ganancias, y un Oscar para Peter Ustinov como actor de reparto.