UN CLASICO PARA ENTRAR EN CALOR
Un clásico para la vuelta de la Superliga no está nada mal, aunque se trate de un partido pendiente. Pero si el choque tiene el atractivo del debut de un entrenador y la chance de que si uno de los equipos gana llega a la punta, tiene otro color. Con ese panorama se cruzarán esta tarde en Avellaneda Independiente y River por la fecha 14.
En el Rojo hará su presentación como DT Lucas Pusineri. Tras el pobre ciclo de Sebastián Beccacece, llega alguien sin experiencia en el fútbol local, pero con espaldas anchas por tratarse de uno de los integrantes de aquel campeón 2002, a la sazón, el último que dio una vuelta olímpica en torneos locales. De ganar, el Rojo alcanzará en el decimocuarto puesto, con 24 puntos, lo que marca lo flojo de su campaña hasta ahora. En cuanto al equipo, Pusineri no contará ni con Nicolás Figal, transferido al Inter de Miami en las últimas horas, ni con Brian Romero, que no fue habilitado.
River, por su parte, tiene 27 unidades y, en caso de lograr la victoria, quedará como líder junto a Argentinos Juniors.
El técnico Marcelo Gallardo no confirmó el equipo ni el esquema que utilizará, lo que dio motivo a varias especulaciones: podría salir con línea de tres defensores y cinco volantes, lo que haría sumar a Gonzalo Montiel y Milton Casco en mitad de cancha o volver a la línea de cuatro defensores, con la incorporación de un doble cinco, con Leonardo Ponzio y Enzo Pérez. Lo que es seguro es que no podrán jugar tres de los habituales titulares: Lucas Martínez Quarta, que llegó a la quinta amarilla en el último partido del año pasado, en la derrota 1-0 contra San Lorenzo; Nicolás De la Cruz, expulsado en ese mismo partido, y Exequiel Palacios, transferido al fútbol alemán. Por el defensor es casi un hecho que entrará el paraguayo Robert Rojas y por Palacios lo hará el juvenil Cristian Ferreyra. En el ataque, quienes más chances tienen son el colombiano Rafael Borré e Ignacio Scocco.
El historial marca una amplia diferencia de River sobre Independiente (74 ganados, contra 452 perdidos y 47 empates), aunque en esta oportunidad se da una curiosidad: de los cuatro encuentros en los que Gallardo visitó el Libertadores como entrenador, perdió tres y empató uno (éste por Copa Libertadores). La última vez que River se llevó los tres puntos en esa cancha fue en 2011 cuando ganó 1-0 con gol de Mariano Pavone.