EL AÑO DE LA BESTIA
Al margen de su intención de cultivar su perfil de actriz, Miss Bolivia también tiene planes con la música, claro. Ahora mismo trabaja en la preproducción de Bestia, un disco de colaboraciones que planea grabar y editar en este primer semestre del año y presentar con una gira por Argentina, América Latina y Europa. Dos de los invitados que ya están confirmados son el Piti Fernández, de Las Pastillas del Abuelo, y Jimena Barón, con quien este año grabó el pegajoso Se quema, cuyo videoclip ya suma 6 millones y medio de reproducciones en YouTube. “La experiencia con Jimena estuvo buenísima –cuenta–. Ella me había invitado a hacer un trío en el “Bailando” y yo no pude, por dos razones: no me lo permitía la agenda y, quizás la más importante, porque soy un queso bailando (risas). Me doy cuenta de que genera prurito en la sociedad, como pueden generar Sex o algunas canciones mías. Pero eso pasa porque vivimos en una sociedad enferma. Cualquier cosa que interpele las rigideces de nuestros síntomas genera rechazo. Mucha gente no se banca una teta o un culo, así como no se banca la legalización del aborto. Pero van a tener que cambiar”. Sobre la recién sancionada ley de cupo que obliga a que los festivales de música tengan sí o sí un 30% de participación femenina, dice: “El cupo no debería existir, pero qué te puedo decir... El sarampión tampoco debería existir. Pero como existe, hay una vacuna. Las vacunas existen porque existen las enfermedades. En este caso, hablamos de la enfermedad social y cultural del patriarcado. Son necesarios dispositivos y también la institucionalización de ciertos mecanismos que hagan balance y empiecen a despatologizar el circuito de la música, donde se han generado desigualdades muy grandes”.