PRIMER GRAND SLAM
LA ESTADOUNIDENSE SOFIA KENIN, DE 21 AÑOS, DERROTO A LA ESPAÑOLA GARBIÑE MUGURUZA Y SE QUEDO CON EL TROFEO EN MELBOURNE. ES LA PRIMERA VEZ QUE GANA UN TORNEO GRANDE.
“MI SUEÑO SE CONVIRTIO EN REALIDAD, PERO NO LO PUEDO DESCRIBIR”, CONFESO SOFIA KENIN
La estadounidense Sofia Kenin logró, con 21 años, su primer título de Grand Slam al derrotar en la final a la española Garbiñe Muguruza en tres sets, por 4-6, 6-2 y 6-2, que buscaba en Melbourne su tercer grande. La norteamericana, de origen ruso, que comenzó el torneo como 15ª jugadora del mundo, nunca había superado los octavos de final de un Grand Slam, pero se mostró superior a una irregular Muguruza.
La final fue un reflejo de lo que es Garbiñe Muguruza como tenista, alternando momentos de gran tenis (35 winners contra
28 de la rival) y otros de desconexión (con 45 errores no forzados, 23 para Kenin, y 8 dobles faltas), frente a una rival que se fue agrandando conforme avanzaba el partido, tanto físicamente como en nivel de juego.
Todo parecía comenzar bien para la española nacida en Caracas, que rompió el saque de la estadounidense en el tercer juego del partido y confirmó con su servicio para ponerse 3-1 a favor. Kenin, que peleaba todas la bolas como si cada una de ellas fuera la del título, igualó el partido 4-4, pero Muguruza reaccionó y sumó dos juegos seguidos para cerrar el primer set por 6-4 en 52 minutos de juego.
El karma de Muguruza. El buen juego de la española en la primera manga dio paso a una de sus famosas desconexiones, dejando que Kenin le rompiera por primera vez el servicio en el cuarto juego del segundo set, que acabó apuntándose por 6-2, aprovechándose de la debilidad de Garbiñe con su primer servicio. Muguruza mejoró en el tercer set, pero por entonces la estadounidense había crecido tanto que veía muy cerca la posibilidad de sumar su primer título de Grand Slam. Decisivo fue el quinto juego, en el que
Muguruza ganó tres bolas de break para ponerse 3-2 a su favor, pero Kenin remontó para mantener su servicio y rompérselo a la española en el siguiente para ponerse 4-2.
Todo estaba en contra para la española, que no solo no reaccionó, sino que acabó el partido con una doble falta, la séptima del encuentro, en una muestra más de la irregularidad que la caracteriza.
Descargo. Muguruza, que afrontó este torneo sin ser cabeza de serie en un Grand Slam desde 2014, aunque recuperó buena parte de su nivel, que la llevó a ganar Roland Garros (2016) y Wimbledon (2017), aseguró que ríe “por dentro” pese a la decepción por perder la final frente a la estadounidense Sofia Kenin. “OK, perdí el partido. Era importante, pero... ¡Hey, estuve acá! Me di la oportunidad de estar en la final. Cuando eres consciente de eso, te tranquilizas un poco”, concluyó.