Joe Biden tendrá el desafío de enfrentar a Trump en las elecciones de noviembre
El ex vice de Barack Obama consolidó una ventaja inalcanzable para su rival en la interna, Bernie Sanders, que se mantiene para que sus propuestas sigan en agenda.
Su apabullante victoria en el “súper martes” fue lo que definió la disputa
Más allá de que aún no esté matemáticamente confirmado, Joe Biden ya se aseguró una diferencia en el número de delegados suficiente para asegurar que será él quien enfrente a Donald Trump en noviembre, tras una campaña electoral que estará dominada por la pandemia del coronavirus.
Tras sus últimas y amplias victorias en las primarias de Florida, Illinois y Arizona, el ex vicepresidente tiene 1181 de los 1190 delegados que necesita para quedarse con la candidatura, frente a los 885 de su rival, el senador Bernie Sanders. Y las encuestas lo muestran al frente en los estados donde están previstas las próximas primarias, aún sin fecha definitiva por la emergencia.
El ex vice de Barack Obama ha sido protagonista de una de las recuperaciones más espectaculares de la política moderna de los Estados Unidos, ya que poco más de un mes atrás arrancó las primarias en forma desastrosa, al quedar cuaren las dos primeras y quinto en la tercera.
Sin embargo, el voto de la minoría afroamericana comenzó a pesar en la primaria de Carolina del Sur, y volcó definitivamente la balanza a su favor a partir del “súper martes”, cuando se impuso a Sanders en diez de los catorce estados que votaron y aseguró su liderazgo.
“Hubo un apoyo masivo del establishment demócrata para Biden, en parte porque no confían en Sanders, pero especialmente porque lo ven como el único candidato que podría derrotar a Trump, ya que puede hablarle también a los votantes más de centro, y permitiría no polarizar aún más el escenario”, dice a PERFIL el politólogo Augusto Salvatto.
Seguir o no seguir. Con la candidatura ya inalcanzable, como le sucedió en 2016, Sanders ha recibido presiones para que desista de las primarias y perto
mita que Biden y el partido se concentren en la campaña para derrotar a Trump en noviembre.
Sanders perdió el martes en las últimas tres primarias. En Florida, Biden ganó con el 62% de los votos, en Illinois lo hizo con el 59% y en Arizona se impuso con el 43% frente a casi el 32% del senador.
“La carrera por la nominación ha terminado. Esa es la realidad que Bernie Sanders enfrenta”, tuiteó el analista David Axelrod, jefe de estrategia de las dos exitosas campañas presidenciales de Obama.
Con una diferencia en el número de delegados imposible de remontar, y con el país sacudido por la emergencia del coronavirus, el senador por Vermont corre el riesgo, dicen sus críticos, de aparecer como
La demora en reaccionar ante la pandemia puede pasarle factura al mandatario
ególatra y fuera de la realidad si insiste en mantener la disputa interna.
La campaña de Sanders ha dejado de impulsar avisos en Facebook y su jefe envió un correo electrónico a sus seguidores en el que no pide donaciones, un signo que suele preceder al abandono de una campaña. “Bernie está perdiendo las últimas primarias por 30 y 40 puntos. Es un signo de adultez saber cuándo hay que desaparecer”, dijo el diputado demócrata Don Beyer.
“Por el bien del país, es hora de que Bernie Sanders se retire y concentrarnos en vencer a Donald Trump en noviembre. No hay camino ni razón justificable para que continúe”, tuiteó otro dirigente demócrata, Robbie Sherwood.
Sin embargo, aún restan 26 primarias, entre estados, territorios y el Distrito de Columbia, donde está la capital Washington, en un proceso que, con las postergaciones