ASCENSO SOLIDARIO
Para intentar colaborar en la lucha contra la pandemia de Covid-19, muchos clubes de fútbol del Ascenso ofrecieron sus instalaciones con el objetivo no solo de que puedan ser utilizadas por las autoridades sanitarias para ayudar a descomprimir los hospitales, clínicas y centros asistenciales, sino también para que los efectivos policiales puedan utilizarlas para descansar y asearse entre turno y turno, y para que los vecinos puedan acercarse a donar todo tipo de mercadería.
Las 23 instituciones que se sumaron a esta cruzada solidaria están ubicadas dentro del ámbito de Capital Federal y del Gran Buenos Aires, donde más casos de coronavirus fueron detectados. Además, muchas de estas modestas instituciones, que de por sí ya están acostumbradas a tener que pelearla día a día para seguir funcionando, organizaron campañas solidarias con el objetivo de recaudar alimentos no perecederos para utilizarlos en ollas populares o donarlos a diferentes comedores comunitarios.
Berazategui y Laferrere son dos de los clubes que se comprometieron con esta cruzada. En el caso de la institución del sur del Gran Buenos Aires, que milita en Primera C, gracias a una primera iniciativa originada por los socios y los directivos se logró juntar 900 kilos de comida y productos de limpieza, mientras que en una segunda cruzada, que está en plena marcha, la Agrupación Resistencia Naranja ya lleva distribuida una cantidad importante de alimentos en merenderos y comedores comunitarios de la zona.
“Además de repartir los alimentos y productos de limpieza y perfumería que nos donaron, también organizamos ollas populares en las instalaciones del club. Mientras la gente nos siga apoyando, vamos a seguir intentando ayudar a los más necesitados que, lamentablemente, cada día son más a causa de esta pandemia”, cuenta Alejandro Riva, miembro de la Subcomisión de Prensa de la ADB.
En el club Laferrere también organizan ollas populares con comidas calientes para repartir entre los vecinos. La idea, que surgió de la Comisión Directiva y de los hinchas, arrancó a principios de este mes, con guisos y locros que se reparten los lunes, miércoles y viernes entre las 12 y las 13 en la sede del club, ubicada en la calle Rodney 1757. “Como club, tenemos un rol social que cumplir y queremos ayudar a la gente que la está pasando mal por la posibilidad de contagios y la falta de trabajo en este momento”, explica el vicepresidente del club, Heber Arriola.