EL FUTBOL FEMENINO NO VA A DESAPARECER
Más allá de este duro momento que nos toca vivir ante esta pandemia que tiene en vilo al mundo entero, estoy convencido de que en los años venideros tanto el fútbol femenino de Argentina como el del resto del mundo va a tener un auge muy importante, porque no creo que ni la AFA ni la FIFA lo vayan a dejar de lado. Claro que el auge va a ser importante en la medida que todos colaboremos y que las jugadoras hagan buenos espectáculos.
En nuestro caso lo que sucede es que hoy por hoy los clubes invierten muy poco en el fútbol femenino, aunque la AFA ayuda a muchos para que lo fomenten. De hecho, ya vemos con agrado que cada vez son más los colegios en los que se les enseña a las alumnas a partir de los 6 años a jugar fútbol.
Es cierto que, en el caso de las mujeres, este parate llegó en el peor momento porque acababa de terminar la ronda clasificatoria y ya estaban definidos los ocho equipos que iban a pelear por la ronda Campeonato y los nueve que iban a jugar la zona Permanencia. Pero las pandemias vienen cuando quieren, y lo primero es cuidar la salud de las futbolistas. Hoy más que nunca tenemos que cumplir con las recomendaciones de las autoridades sanitarias para que esto pase cuanto antes. Después se verá cómo seguimos.
Si bien el Covid-19 afecta a todo el fútbol por igual, el presupuesto de la rama femenina en Argentina es exiguo, por lo que no tendría que tener problema en mantenerse. La AFA es el principal auspiciante de todo esto y no creo que deje de incluir a las mujeres en el programa de fútbol que elaboró desde la asunción de Claudio Tapia como presidente.
Aunque desde FAA intentamos resolver los problemas de todas las jugadoras, lo cierto es que, por el momento, nos preocupamos solamente por las que integran los planteles de los clubes de
Primera División, más allá de que en la categoría no todas tienen contrato con sus clubes.
Por otra parte, tenemos que reconocer que los dirigentes de los clubes han hecho un gran esfuerzo y les han pagado el sueldo a sus jugadoras, algunos en su totalidad y otros, una parte. Pero la gran mayoría de los dirigentes han honrado su palabra, y eso es muy importante y valioso en este momento tan particular que está viviendo el mundo.