Alberto, Axel y Larreta definen cuándo se endurece la cuarentena
El Presidente recibe mañana a los mandatarios. “Vamos a tomar una decisión”, anticipó. Ayer la cifra de contagios bajó a 1.634.
La cuarentena atraviesa su momento de mayor tensión luego de cumplirse tres meses de vigencia y con dos días consecutivos con cifras récord el jueves y viernes. Ayer se aplacó, como pasa siempre los fines de semana, pero ya quedó un piso elevado que puso en alerta a las autoridades. En ese marco, Alberto Fernández recibirá mañana en la Quinta de Olivos al gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Tendrán un solo objetivo: analizar cuándo es el mejor momento para endurecer el aislamiento social, preventivo y obligatorio.
“Quedamos en vernos el lunes los tres para tomar una decisión. Estamos en una situación muy complicada”, declaró ayer el Presidente en diálogo con El Destape Radio. Y dejó claro cuál es la principal preocupación: la ocupación de las camas de terapia intensiva. “Les dije a Axel y a Horacio que es el momento en que tenemos que empezar a contar las camas. No quiero llegar al momento en que tenemos que decidir a quién salvamos y a quien no”, remarcó.
Sectores del oficialismo, sobre todo desde la provincia de Buenos Aires, vienen reclamando por una vuelta atrás inmediata. En la Ciudad, en cambio, son más cautos y prefieren esperar. En todos los sectores tenían previsto esperar a ver qué cifras arrojaba el fin de semana. Hasta ahora, siempre fueron días de menos casos confirmados, sobre todo porque se hacen menos testeos.
“Si siguen las cifras récord es para preocuparnos”, razonaba ayer un funcionario porteño. En caso de que hoy se repitan números similares a los de ayer, en los que se confiram 1.634 casos nuevos, permitirían llegar a la reunión del lunes con otro clima.
De todas formas, existe una certeza en los tres gobiernos: tarde o temprano, será necesario volver a una cuarentena más estricta, limitando de nuevo actividades, para volver a amesetar la curva de contagios y evitar que colapse el sistema sanitario. Funcionarios de Kicillof son más pesimistas y creen que en menos de 30 días se puede saturar la disponibilidad de camas. En Ciudad, con las cifras actuales, apuntan a fines de agosto, lo que implicaría, según explican, poner un freno unas semanas antes.
Larreta y Kicillof se reunieron el viernes en La Plata para seguir buscando coincidencias sobre cuáles son las cifras que deben seguir de cerca. Además de la disponibilidad de camas de terapia apuntan al “R” (tasa de contagios) y la velocidad de duplicación de casos. Ayer, volvieron a quedar en evidencia diferentes velocidades en los dos distritos. Provincia volvió a superar los mil (1.013) y la Ciudad, después de los 804 del viernes bajó a 512.
En el gobierno nacional, en tanto, ya reconocen que en breve comenzará una etapa de “cerrar y abrir, para volver a repetir”.