Con el estilo de Pablo Escobar
Mameluco es uno de los narcotraficantes más pesados de la zona norte del Conurbano, con tanto poder que llegó a probar suerte en la política con ansias de convertirse en el nuevo jefe comunal de San Martín. Algo así como lo que intentó hacer Pablo Escobar en Medellín cuando presentó su candidatura a senador. En 2001, su nombre aparece por primera vez en la crónica policial cuando lo detienen en un peaje de la autopista Riccheri. Fue el 13 de septiembre de ese año. Desde hacía varios meses estaban investigándolo, pero no podían dar con él porque manejaba una camioneta 4x4 con credencial de “libre tránsito y esta- cionamiento” del Ministerio del Interior de la Nación. En esa investigación se descubre que Villalba había enfrentado a otras bandas de narcos, secuestrando a sus integrantes y pidiendo dinero y droga como rescate, una vieja modalidad que tiene como objetivo debilitar a las bandas que intentan meterse en el negocio. En 2004, Mameluco recibe una de las condenas más altas por narcotráfico de la época: 12 años y medio de prisión. Es en ese expediente donde aparecen vínculos con personal de la Policía Bonaerense, aunque nadie hace mención a Pablo Bressi. Por aquellos años, el ahora jefe de la Bonaerense formaba parte del Grupo Halcón. Ocho años y medio después, Mameluco sale de la cárcel al cumplir las tres cuartas partes de la condena. Al poco tiempo presenta su candidatura a intendente de San Martín, impulsada por un sector del peronismo. Decía que estaba retirado del negocio de las drogas y hasta desafiaba a sus posibles rivales asegurando que les conocía la cara a todos. En 2011 lo acusan de traficar treinta kilos de marihuana junto a su hermano, y tres años más tarde es condenado a 23 años de cárcel. Actualmente está preso en el Complejo Penitenciario I de Ezeiza, donde realiza trabajos de limpieza.