Más de 300 muertos en Irak por ola de ataques de EI contra chiitas
El último se produjo el jueves por la noche en un mausoleo en las afueras de Bagdad. Buscan provocar la violencia sectaria.
Con el objetivo de profundizar la tensión sectaria entre sunitas y chiitas, Estado Islámico golpeó con salvajismo nuevamente en Irak, atacando un mausoleo al norte de Bagdad, donde masacró a 37 personas.
La acción, el jueves por la noche, ocurrió después del ataque del domingo pasado en la capital de ese país, que causó 292 víctimas fatales y al que el primer ministro Haidar Abadi respondió en las últimas horas con el despido de los líderes militares y de seguridad de la ciudad.
Este nuevo atentado contra un símbolo chiita se produjo en el mausoleo de Seyed Mohammad, hijo del décimo imán de ese grupo, Ali al-Hadi, donde una multitud de fieles participaba en las celebraciones de la fiesta de Eid al-Fitr, que marca el final del mes de Ramadán.
El lugar de culto se encuentra en Balad, ochenta kilómetros al norte de Bagdad y cuarenta al sur de Samarra.
El mausoleo se levanta en un área predominantemente sunita, y es evidente la intención de EI de hacer estallar nuevos conflictos sectarios para llamar la atención en esta región. En 2006, un ataque a la tumba del imán Ali al-Hadi había dado paso a una guerra intestina que se prolongó por dos años y causó decenas de miles de muertos. Suicida. De acuerdo con una reconstrucción de las fuerzas de seguridad, fue justo antes de la medianoche de ayer cuando un atacante suicida se inmoló en la entrada del mausoleo de Seyed Mohammad, allanando el camino para que otro kamikaze se hiciera estallar en el interior.
A l mismo tiempo, otros yihadistas entraron en acción disparando contra las personas que se encontraban en el patio, mientras que un tercer atacante murió antes de que pudiera hacerse estallar cerca de la multitud. Además de las 37 muertes, al menos unas 60 personas resultaron heridas, algunas de gravedad.
Estado Islámico se atribuyó la responsabilidad del ataque a través de sitios web normalmente utilizados por la organización, mientras que el gobierno de Irak envió refuerzos y escuadrones de la policía militar a Balad, donde se estableció un toque de queda para prevenir la violencia entre sunitas y chiitas.