Hacer un buen barbecho, clave para subirse a a la siembra del maíz, el cultivo vedette del año
El proceso agronómico por el que se limpian los campos de malezas y plagas se vuelve fundamental, según los expertos de la Asociación de Semilleros Argentinos.
Una nueva siembra de maíz está a la vuelta de la esquina y como siempre implica que los productores estén atentos a todos los factores que pueden influir en el desarrollo del cultivo. Para comenzarla con el pie derecho, la Asociación de Semilleros Argentinos (ASA), que agrupa a los proveedores de semillas, indica que es necesario hacer un buen barbecho. Se trata del proceso agronómico mediante el cual se limpian los campos de malezas y plagas. En los úl- timos años, y de la mano de la siembra directa que dejó a un lado los movimientos de tierra (con arados, por ejemplo), ese barbecho pasó a ser químico. Es decir que, con la aplicación de productos químicos se logra “quemar” toda maleza y plaga que pueda alojarse en los rastrojos y luego competirá por el agua y los nutrientes de igual a igual con el cultivo. A modo de ejemplo, vale recordar que, en zonas con alta presión de malezas como Amaranthus, los productores pueden tener que gastar hasta 200 dólares por hectárea para controlarlas efectivamente.
Según ASA, “el barbecho largo (antes de julio) permite controlar mejor las malezas sin aumentar la dosis de herbicidas, porque todavía hay suficiente humedad edáfica (del suelo), las temperaturas no son tan bajas y las malezas están en período juvenil. Esto permite comenzar la siembra con el lote limpio, además de acumular agua en el perfil del suelo, lo que asegurará una buena emergencia de las plantas”. Por su parte, alertan que “realizar un barbecho corto (fines de agosto, principio de septiembre) es menos conveniente porque el suelo está seco y las malezas grandes; por lo tanto su control es más dificultoso y costoso. En esta etapa las malezas ya consumieron agua y nutrientes destinados al maíz y aportaron semillas al suelo que se convertirán en un problema mayor más adelante.
Una gran proporción del maíz sembrado en nuestro país tiene tecnología de protección contra insectos (Bt), donde el manejo del barbecho es fundamental para aprovecharla al 100%. Eliminar el “puente verde” reservorio de plagas es de suma importancia. “Para ello necesitamos el lote y las borduras libres de malezas por lo menos treinta días antes de la siembra. Si hay malezas en presiembra, es recomendable monitorear y ante alta presencia de gusano cogollero aplicar un insecticida, porque de lo contrario larvas grandes provenientes de las malezas pueden moverse al maíz Bt y provocar daño sin llegar a ser totalmente controladas por
El manejo del barbecho es clave para aprovechar la protección anti insectos
la tecnología”, indicaron desde la entidad.
Otro de los temas que suscitan la atención de la comunidad agropecuaria es la necesidad de cuidar la tecnología. Si no se cumple con las prácticas agronómicas recomendadas, lo más seguro es que en un par de temporadas se pierda una nueva tecnología. Como dice el ingeniero agrónomo Daniel Igarzábal, “hay que entender que la plaga se adapta. Hay que cambiar la forma de hacer las cosas para evitar resistencias y lograr que perduren las tecnologías”.
Justamente, para el cuidado de la tecnología Bt, ASA recomienda: * Barbecho de por lo menos treinta días sin utilización de insecticidas. * En el caso de lotes enmalezados, realizar monitoreo para detectar presencia de gusano cogollero ( Spodoptera frugiperda). * Ante alta presencia de la plaga, realizar una aplicación de insecticida para evitar su accionar como cortadora en estadios tempranos del maíz.