Cara bonita
De novia con Joaquín Furriel, asegura que los veinte años que él le lleva no los distancian en lo absoluto.
—Sí, había leído el guión y sentí que este personaje era para mí. Que estaría bueno mostrarme como actriz. Es un drama erótico, se cuenta la historia de una pasión entre dos boxeadores. Tiene algo de crudo y salvaje.
—¿Cuáles son las dificultades de filmar escenas estando desnuda y con otro actor en tus mismas condiciones de exposición?
—Me preguntaron mucho si nos pasaba algo, y la verdad es que no nos conectábamos con tanta gente alrededor y estando desnudos. El sexo es un acto íntimo, por lo cual, aunque estábamos desnudos, no se daba erotismo entre nosotros. Fue una ventaja hacerlo con Leo (Sbaraglia), que es un gran profesional con mucha experiencia en el cine y que sabe resolver estas escenas.
—¿Cuánto hace que salís con Joaquín? ¿Te ayuda?
—No soy de contar los meses, pero serán siete. Tenemos caminos diferentes. El tiene una formación, ya que es egresado del Conservatorio. Su recorrido fue más intelectual, con un gran recorrido en el escenario. Nos acompañamos muchísimo, pero ninguno se mete en el trabajo del otro. Compartimos profesión, pero tenemos distintas visiones y nuestras cerreras son diferentes.— ¿Vio la película? ¿Qué le pasará con los desnudos?
—(Se ríe) Todavía no la vio. Es un actor y seguramente debe haber tenido o tendrá escenas con otras actrices. Joaquín no es una persona celosa, le gusta que haya filmado con Leo (Sbaraglia) porque lo admira.
—¿Sentís la diferencia de edad (se llevan veinte años)?
—El vivió más que yo, pero no me importa. Cada persona es distinta. Estamos disfrutando el ahora, no convivimos. Me encantan las familias, y casi todas las mujeres tenemos la idea de formar un hogar con hijos.