“Al público no lo llevás con un decreto”
En un contexto en el que el cine nacional tiene mucha producción y escasa convocatoria, el director del Incaa propone un cambio de paradigma y comenzar a preocuparse más por la distribución y la exhibición.
Francia es el país a imitar, si vale la palabra”. La frase es de Alejandro Cacetta, el actual presidente del Incaa, el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiosuales. Francia, como cualquier cinéfilo sabe, está considerado un paraíso para países cuya industria cinematográfica no son contenidas por su propio mercado ( piensen en Ho - llywood, Bollywood y China, y listo) y se necesita la presencia del Estado para regular la actividad. Es justo reconocer que el panorama que recibió no es demasiado alentador: el cine argentino, si bien con una gran cantidad de películas producidas, está lejos de ser el que más seduce al público local. Entre las diez películas más vistas de lo que va del año, sólo una es argentina. La produjo él: Me casé con un boludo. Cacetta ya lleva ocho meses, desde que dejó la producción de cine a la que se dedicaba para ocupar su nuevo rol, y si bien el modelo francés es una cita más o menos obligada, frente a la repregunta que implica si realmente cree que es posible algo así aquí, se lanza: “Sí, claro, hay una cuestión de protección y de racionalidad y de entender el mercado, que no pueden venir separados. Hasta ahora pensábamos, y desde la industria también, porque era como un reclamo y un reclamo a nosotros mismos también, en ‘marcar la cancha’, y eso sirve hasta un punto. Al público no lo llevás con una resolución, con un decreto, con una obliga- ción, y eso tiene que ver con el mercado. Entonces, está bien que haya una cuota de pantalla y una media de continuidad que ayuden al cine nacional a estar en salas, pero viendo dónde está el mercado y dónde sirve. Hoy no está sirviendo mucho, porque los problemas siguen estando.”
—¿Cómo ves hoy la gestión que comenzaron a finales del año pasado? ¿Qué han logrado hasta ahora?
—Creo que el primer gran punto fue armar un muy buen equipo de trabajo, poder tener un organigrama que funcione y esto de cara a la organización interna que también tiene que ver con estar bien armados para el ser vicio que tiene que dar Incaa. Hay seis objetivos puestos de gestión, que los pusimos el primer día y todos l os días va encaminándose a ser cumplidos.
—¿Cuáles son entonces esos objetivos?
—Todo lo que se fue avanzando, en algunas áreas más, en otras menos: el ordenamiento, la transparencia y el trabajo en equipo, la generación de público (hemos firmado un acuerdo con Francia), ya lanzamos un programa que está funcionando muy bien que es “Las escuelas van al cine”, estar hablando de la producción y la exhibición multiplataforma, lanzamos los concursos de televisión y estamos trabajando muy en conjunto, cada uno en su especificidad y cumpliendo con la ley, los espacios de exhibición con mucho trabajo en los Espacios Incaa (creamos una