Juez del Mensalão cree que Temer podría “no terminar” su mandato
Joaquim Barbosa, el ex presidente de la Corte Suprema de Brasil que lideró la investigación por corrupción conocida como “Mensalão”, criticó el impeachment de Dilma Rousseff y advirtió que el gobierno de quien la sucedió, Michel Temer, “corre el riesgo de no terminar”.
Barbosa lideró el Mensalão, una serie de juicios que mandaron a la cárcel a “pesos pesados” como José Dirceu, ex mano derecha de Lula da Silva. Tras dejar su cargo, un año atrás, permaneció en silencio durante todo el proceso que concluyó con la destitución de Dilma Rousseff.
“El impeachment fue una escenificación. Todo estaba planeado desde 2015”, dijo Barbosa al diario Folha de São Paulo.
Para el jurista, sólo se cumplieron las formalidades. “Lo que hubo fue que un grupo de políticos que supuestamente daban apoyo al gobierno, en un determinado momento decidieron que destituirían a la presidenta. El resto fue una escenificación. Los argumentos de la defensa no fueron considerados”.
El impeachment, advirtió Barbosa, fue impulsado “por parlamentarios con motivos espurios: impedir las investigaciones por corrupción en contra de ellos. Fue un velo que se creó para cubrir el motivo real, que sigue en pie”.
Pese a sus críticas, Barbosa no adhiere a la tesis de un “golpe”, impulsada por el PT de Lula da Silva y Dilma Rousseff.
“No digo que fue un golpe. Pero digo que las formalidades externas del proceso se observaron. Pero eran eso, formalidades”. Fragilidad. La alianza entre Temer, cuando era vice de Dilma, y el Congreso, creó un “desequilibrio institucional” que fragiliza la democracia brasileña, y amenaza al gobierno actual, advirtió Barbosa.
“El gobierno corre el riesgo de no llegar a su fin. Es tan artificial la situación creada por el impeachment, que creo, sinceramente, que este gobierno no resistiría una serie de grandes manifestaciones populares”, explicó.
Finalmente, Barbosa elogia la marcha del Lava Jato, la investigación por la corrupción en Petrobras que golpea a toda la clase económica y política del Brasil.
“Acompaño el Lava Jato por la prensa. Para mí, es la Justicia que está dando toda la apariencia de funcionar bien”, concluyó.
“El impeachment estaba plenado desde 2015. Fue todo una escenificación.”