Un general retirado, al que llaman ‘Perro Loco’, será secretario de Defensa
QUIEN ES
Empeñado como está en romper con todas las tradiciones de Washington, Donald Trump anunció que tendrá a un militar al frente del Pentágono, el primero desde la Segunda Guerra Mundial.
Se trata del general retirado James Mattis, que será el primer oficial de carrera que dirija el Pentágono en siete décadas.
Mattis, de 66 años, es un general de la Marina que se retiró en 2013 tras servir como comandante del Comando Central, responsable de dirigir las guerras estadounidenses en Irak y Afganistán.
“El ‘Perro Loco’ es excelente, es excelente”, dijo Trump al anunciar que nombrará a Mattis, conocido por ese apodo.
General retirado del Cuerpo de Marines, Mattis también es conocido por su intelectualidad, su biblioteca con más de 7 mil libros, y por darles listas de lecturas a sus oficiales. Dudas. El nombramiento de Mattis crea interrogantes sobre la creciente influencia de un puesto diseñado para asegurar un control civil en las fuerzas armadas.
Las principales preocupaciones radican en saber si un militar retirado confiará más en soluciones militares a problemas internacionales, en vez de tomar posturas diplomáticas y más amplias.
Para que Mattis sea confirmado, el Congreso primero tendrá que aprobar una propuesta que permita eludir una ley que prohíbe que oficiales militares retirados estén al mando del Pentágono en los siete años posteriores a su retiro.
James “Perro Loco” Mattis tiene 66 años. A los 18 se enroló como Marine.
Estudió Historia y dirigió sus primeras tropas en la Operación Tormenta del Desierto.
Comandó las primeras tropas que invadieron Afganistán e Irak.
“En Afganistán uno encuentra tipos que han abofeteado a las mujeres durante cinco años porque no usan un velo. Es muy divertido dispararles”, es una de sus frases. Un duro. Mattis tiene reputación como militar endurecido por guerras y de ser un marine de voz firme al que se le confiaron algunas de las órdenes más duras para las fuerzas armadas. En un tuit enviado el mes pasado, Trump lo describió como “¡Un verdadero general de generales!”.
Mattis sería sólo el segundo militar retirado en servir como secretario de Defensa. El primero fue George C. Marshall, en 1950-1951, durante la guerra de Corea. Marshall fue un personaje muy diferente. Antes fue secretario de Estado y tuvo un papel clave en crear vínculos cercanos con Europa occidental tras la Segunda Guerra Mundial.
El general, con una imponente trayectoria militar, tiene sin embargo muy poca experiencia en el área de la diplomacia, como requiere el puesto de secretario de Defensa. O como requería hasta ahora.