Dujovne define el ‘plan Excel’ con metas trimestrales de ajuste
Como anticipó PERFIL, la semana que viene presentará un paper
Será la primera gran marca de la gestión de Nicolás Dujovne como ministro de Hacienda desde que reemplazó a Alfonso Prat-Gay, y tendrá el sello de su métier: la política fiscal. Junto a Rodrigo Pena, a cargo de la Secretaría de Hacienda, el equipo económico trabajó ayer para terminar el programa fiscal con metas trimestrales de reducción de gasto, que será presentado a más tardar el miércoles próximo.
La meta de déficit fiscal para este año es del 4,2% del Producto Bruto Interno. “La idea es mostrar con detalle cómo se conseguirá trimestre por trimestre”, explican allegados al funcionario que, no bien asumió, recibió, como contó PERFIL el 30 de diciembre, la orden de armar un plan de reducción fiscal detallado.
La idea del vicejefe de Gabinete Gustavo Lopetegui, que en la dupla con Mario Quintana es el encargado de seguir los temas fiscales, es también que haya un detalle de cómo será la reducción del rojo fiscal en los próximos años, al menos hasta 2019, aunque también venían trabajando con lineamientos para 2021.
El propio Dujovne lo había escrito el 20 de diciembre en el diario La Nación: “La principal duda de los inversores se refiere a la capacidad del Gobierno de reducir el déficit”. Y en sus apariciones en los medios antes de ser funcionario, ya recomendaba hacer proyecciones de reducción de déficit con un destinatario claro: los posibles inversores en la Argentina y fundamentalmente el mercado financiero, que es el que le está pres- tando grandes sumas de dólares a la Casa Rosada para, como sostiene el presidente Mauricio Macri, permitir un ajuste fiscal gradual. Método. Cuando se presentó en su primera conferencia de prensa, Dujovne ya había dicho que era un conocedor del Presupuesto línea por línea y que buscaba proyectar un “ajuste fino” en las áreas del Estado.
Hoy el déficit fiscal suma unos $ 500 mil millones. En Jefatura de Gabinete, de hecho, trabajan en cuatro líneas de políticas para llevar el déficit a la baja en los próximos trimsetres y años:
Reordenar “el gasto impro- ductivo en los ministerios”.
Ir congelando los aumentos de las partidas del Presupuesto, o aumentándolos por debajo de la inflación, para que, con una economía en crecimiento, “se licúe” su peso en el total de la economía.
Seguir bajando los subsidios a transporte y energía, que este año insumieron 3 puntos de 4,8 total de déficit.
Revisar otros subsidios por fuera de ellos, en especial los vinculados a “empresas públicas que no son tan conocidas”, como Yacimientos Río Turbio, el astillero Tandanor o Fabricaciones Militares, que insumen unos $ 50 mil millones por año.
La presentación del documento aspira a ser una señal para analistas e inversores que ven en las posibilidades de reducción del déficit una de las mayores debilidades de la actual gestión. La aspiración es ambiciosa: empezar con un sendero de recortes, como planea Dujovne, en un año de elecciones legislativas y luego de varios errores no forzados.