Creerle a Sturzenegger, clave para tomar los planes a 30 años con UVA
Tras el anuncio de los bancos Nación, Provincia y Ciudad de planes a largo plazo que ajustan por el costo de vida, inmobiliarias e inquilinos ponen reparos. Qué conviene.
La adhesión a los créditos hipotecarios a largo plazo anunciados esta semana dependerá de cuánto le crea el público al plan de metas de inflación del Banco Central de Federico Sturzenegger, según lo expresado por expertos del sector inmobiliario. Para aquel que asuma que la inflación está en baja definitiva, será un buen negocio. Para el que no, mejor que lo deje pasar.
Las nuevas líneas de créditos hipotecarios anunciadas por los bancos Nación, Provincia y Ciudad –los créditos ya están disponibles en algunos bancos privados– son de treinta años de plazo y ajustables por inflación, a tasas entre 3%y 7% que se agregarían a los aumentos de precios. “La preocupación con créditos a tan largo plazo es que este gobierno no va a durar treinta años, la gente nos llama preocupada por esos años después de que termine este gobierno y cómo funcionaría ahí”, explica Armando Pepe, presidente del Centro de Corredores Inmobiliarios. Pepe destaca que “si logran bajar la inflación, este tipo de crédito tiene un potencial espectacular, porque en Chile el mismo tipo de sistema funcionó muy bien”. El problema es que el 17% pronosticado por el Banco Central no es una percepción compartida por muchos. Según la última medición de la Universidad Torcuato Di Tella, las expectativas de inflación por parte de la población son de 25% para los próximos 12 meses. Recorrido. Un dato a tomar en cuenta respecto del potencial de este tipo de planes es que en años anteriores, a nivel nacional, la cantidad de operaciones que involucraban créditos no superaba el 2%, el año pasado sólo en CABA llegaron a 13% del total, según Pepe.
Según Héctor D’Odorico, “esto es una apuesta por parte del que toma nota de que la inflación va a bajar”. Para el titular de la inmobiliaria que lleva su nombre, con el plan de créditos, junto con el posible desembarco en abril de fondos del sincera- miento fiscal al sector inmobiliario, proyectan un abril muy positivo para el mercado.
En una posición más crítica, Héctor Polino, titular de Consumidores Libres, considera que lo segundo más importante para este tipo de iniciativas, además de los niveles de inflación futuros, es “cómo se implemente, la reglamentación y el nivel de controles por parte del Estado y el compromiso por parte de los bancos de mantener a largo plazo la política”.
Frente a las preocupaciones sobre una mayor inflación futura, Javier González Fraga, director del Banco Nación, aclaró que “el que tiene miedo de que eso pase puede elegir el crédito a tasa fija pura”.