Lázaro Báez, internado.
Fue trasladado a una clínica por una arritmia. Novedades en la causa.
La Cámara Federal de Casación Penal dictaminó ayer que antes de que se eleve a juicio oral la causa por lavado de activos contra Lázaro Báez, quien anoche fue otra vez internado, la Justicia deberá primero investigar en profundidad la responsabilidad de los ex funcionarios kirchneristas, y eventualmente la de Cristina Kirchner.
La Sala IV del máximo tribunal penal del país rechazó un planteo de la defensa de Báez contra un pedido de la Unidad de Información Financiera (UIF) para “ampliar la investigación en forma previa a la elevación a juicio”.
Para los camaristas, además del delito de lavado, la maniobra podría incluir “fraude a la administración pública y cohecho”. El juez federal Sebastián Casanello dio por probado que el empresario kirchnerista lavó una cifra superior a los 35 millones de dólares y también demostró cuál fue el circuito que hizo el dinero, pasando por Suiza para volver al país.
En paralelo, el juez Julián Ercolini lo investiga por haber sido beneficiado de manera ilegal con contratos millonarios de obra pública. Para el magistrado, que recibió un informe detallado de los fiscales Ignacio Mahiques y Gerardo Pollicita, el gobierno nacional, que estaba en manos de Cristina Kirchner, direccionó las licitaciones –sobre todo en Santa Cruz– para que Báez, que era amigo de la familia presidencial, se convirtiera en un empresario millonario. Los fiscales incluso denunciaron que se había armado un sistema para usufructuar los recursos del Estado en beneficio propio.
Ayer Báez fue trasladado de la cárcel de Ezeiza al sanatorio Los Arcos para que le re- visaran una arritmia crónica, que arrastra desde hace tiempo pero que en las últimas horas presentó alteraciones. El Servicio Penitenciario Federal se encargó del traslado y mantiene la custodia.
Báez había solicitado que le permitan viajar a Santa Cruz para visitar a su madre, que está muy enferma y no está enterada de su detención. Para que se concrete, el Servicio Penitenciario tiene que enviarle a Casanello informes con el estado de salud del detenido y con las garantías de que el traslado se podría realizar sin inconvenientes.