Cuando ‘pasar al probador’ en realidad es entrar a una cancha
Para sostenerse frente al e-commerce, los locales al público incluyen pistas de atletismo y espacios para testear productos.
Frente a la mayor cantidad cada año de compras online, varias tiendas tradicionales se enfrentan a la dificultad de reconvertirse a un mundo digital. Algunos eligen pasar el negocio completamente al mundo online mientras que otros se plantan en el negocio tradicional. Y en el medio, otros hacen como On Sports, una tienda de ropa deportiva que encuentra un lugar con sello propio.
El emprendimiento, basado en Ituzaingó, se destaca con sus clientes por su predio de 2 mil m2 que incluye espacios para practicar fútbol, básquet, hockey, boxeo, y un parque de skate, que comparte físicamente con su sitio de e-commerce. En estos, los clientes pueden probar la indumentaria en la que están interesados y, a través de las tablets que usan todos los empleados del local, averiguar al instante el stock y variedad de ese producto, e incluso efectivizar la venta. La inmediatez del proceso no se traduce en visitas breves, según representantes del local, con la mayoría de los consumidores llegando a pasar en promedio tres horas en el predio. Doble presencia. La página de ecommerce, abierta desde principios de mes es un punto central. Con un poco menos de un mes de actividad, el sitio ya registró 130 mil visitas de más de 28 mil usuarios, que se sumarían a las compras in situ de los visitantes físicos que reciben. Si bien el diferenciador de la tienda es, en sus propias palabras, “la . experiencia integradora de poder probar de mejor manera los productos antes de comprarlos, al proveer un espacio físico lo suficientemente grande”, no se olvidan de que potencialmente tienen el reloj en contra. El plan a futuro es que las ventas puedan hacerse en el momento a través de las tablets de los empleados sin tener que pasar por la caja de cobros, pero por ahora, la tecnología no pudo ser adoptada de forma total.
Tampoco se olvidan de la vinculación entre lo físico y lo virtual. “Desde nuestra tienda física se va a potenciar nuestra página de e-commerce: y viceversa, apuntando a una experiencia de compra innovadora e interactiva” explica Hernán Heevel, director general de la marca, uno de los casos testigos de la convergencia.
En el futuro próximo, la marca planea expandirse. Para fines de 2017 proyectan la apertura de un local en Tigre y están en las primeras averiguaciones de llevar el modelo físico/digital a Moreno y Merlo.