Un molde de comedia agotado con protagonistas sin gracia
CANTANTES EN GUERRA
Dirección: Fabián Forte Guión: Lucas Bucci, Micaela Libson, Nicolás Silbert Intérpretes: José María Listorti, Pedro Alfonso, Miguel Angel Rodríguez y Dady Brieva. Origen: Argentina (2017)
En lugar de usar las torpezas de Cantantes en guerra como para donde boxear con las mismas ideas y otra vez contra las mismas formas (la comedia local que apela a instintos televisivos), quizás podría usarse como un objeto para entender esa forma de humor, que si bien tiene sus nervios pierde al no saber apro- vecharlos, al doblegarse donde sobran exponentes que resisten de explotar muecas que hicieron famosos a sus actores.
Peter Alfonso y José María Listorti vuelven a jugar a la dupla cómica, al antagonismo que deriva en situaciones absurdas gracias a que sus personajes están o muy por encima de sus capacidades o haciendo papelones. Listorti es otra vez el bo- balicón noble y Alfonso juega a otro rol, pero no hay mucha variante. El problema es que la chispa que poseen, aunque cuestionable por varios, se ahoga en un molde de comedia que pierde por mimesis, por no pensarse desde nuestra idiosincrasia más allá de la típica morisqueta reconocible. Es un tic clásico: lo que funciona, en calidad, en comedias con Will Ferrell, por nombrar un actor de comedia popular con resultados torpes en los últimos instantes de su carrera, aquí se ejecuta más por espejo (sino espejismo) que por pensar donde podría ser graciosa tal o cual caricatura.
Es decir, incluso en sus limitaciones que poco tienen que ver con el público infantil al que apunta el film y más con su poca naturalidad, con sentir que los gags se encastran y también se chocan de frente con lo que podrían haber sido, Cantantes en guerra podría ser más. Lo que una comedia así necesita es parecerse menos a algo que no puede ser nunca, y abrazar algo más que su condición de chivo (Adam Sandler es descarado en ese sentido, y todo Hollywood) y los cartoons de sus protagonistas. El cine mainstream local necesita entender qué hacer y qué no a la hora de la comedia, y eso ha quedado más que claro en esta temporada.