Menéndez, el alcalde de pantalones chupines que liderará a los barones
Espinoza se bajó, se logró la unidad y el intendente de Merlo será el nuevo titular del PJ en la Provincia. Fue massista, pero volvió al kirchnerismo para destronar a Othacehé.
Algunos años atrás, los barones del conurbano bonaerense hubieran reído a carcajadas si alguien les hubiese advertido que un dirigente con gel en el pelo, pantalones chupines y remeras excéntricas sería el nuevo titular del Partido Justicialista. Sin embargo, el clima de cambio también llegó al peronismo y Gustavo Menéndez será quien, a partir de diciembre, presida el partido.
Para llegar hasta allí, Menéndez primero debió destronar a uno de esos viejos barones. La pelea por la intendencia en Merlo llegó a convertirse en una de las contiendas más violentas del conurbano bonaerense. Amenazas, golpizas y tiros eran el escenario común de cualquier campaña en el distrito que supo gobernar Raúl “el Vasco” Othacehé.
Menéndez lo conocía bien. En los inicios de su carrera política ocupó la Subsecretaría de Tierra del primer mandato del histórico intendente pero al poco tiempo, en 1995, decide abandonar sus filas. En 2003, Menéndez sintió que la pelea por la intendencia estaba cerca. Apoyó la candidatura presidencial de Néstor Kirchner, mientras Othacehé se fotografiaba con Adolfo Rodríguez Saá. Envalentonado, llegó a las oficinas de un Kirchner ya presidente y puso sobre la mesa denuncias contra el entonces intendente, incluso por violación a los derechos humanos.
Pero Kirchner negoció con el viejo barón y le cerró las internas para que no pudiera participar. Pasaron las elecciones de 2005, 2007, 2009 y 2011 y en ninguna de ellas el kirchnerismo le permitió presentar una lista interna. En ese entonces consiguió el apoyo de Eduardo Duhalde y se presentó por fuera del Frente para la Victoria, elección en la que apenas consiguió el 13%.
En 2013 decide aliarse con Sergio Massa y consigue quedar a menos de dos puntos en la elección municipal. Pero una vez más debió ver cómo su jefe político pactaba con quien peleó en el territorio. La foto de Massa con Othacehé hizo que Menéndez abandonara al tigrense y volviera a refugiarse en el peronismo. Con el Vasco en las filas del Frente Renovador, finalmente en 2015 Menéndez logra quedarse con la boleta del Frente para la Victoria y terminar con 24 años de gobierno de Othacehé.
Desde la intendencia, Menéndez no dejó de pasar desapercibido. No sólo por su estética, las selfies y videos que sube a las redes sociales, sino también porque se convirtió en uno de los jefes comunales que abrió el diálogo con dirigentes de distintos partidos para comenzar a pensar en la unidad hacia 2019.
Ahora será la titularidad del PJ (que intercambiará el año próximo con el intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray) el lugar desde donde deberá conseguir esta unidad. Aunque tiene aspiraciones a la gobernación, los intendentes ya le advirtieron que este nuevo rol no deberá ser un trampolín para una postulación. Sin embargo, Menéndez quizá siga sorprendiendo a sus propios compañe
ros.