Londres vivió una tarde de terror por una falsa alarma
Uno de los lugares más turísticos de Londres, Oxford Circus, fue escenario ayer de una estampida de pánico de miles de personas que desbordaban la zona por el Black Friday, en lo que resultó ser una falsa alarma de ataque terrorista.
La céntrica estación de metro de Oxford Circus reabrió por la tarde después de que la policía no hallara rastro de sospechosos o disparos de los que fue avisada poco antes.
“No hemos identif icado ningún rastro de sospechosos, evidencias de disparos o víctimas”, informó la policía en un comunicado, dando por concluida la alarma.
Las estaciones de Oxford Circus y la vecina Bond Street “reabrieron y todos los trenes se detienen con normalidad”, anunció por su parte la compañía de transporte público.
La policía había recibido avi- sos de disparos en la estación de Oxford Street poco antes de las cinco de la tarde locales y respondió a ellos “como si fuera un incidente terrorista”.
“Pero no hay ninguna constancia de víctimas, informó el comunicado policial, que aclara que la persona herida fue una mujer que se golpeó cuando abandonaba la estación.
Los testigos constataron que, en determinado momento, la gente salió corriendo de la estación y huyó de la zona, la principal área comercial de Londres, siempre repleta de gente y más en época prenavideña.
“La gente empezó a gritar. Me empujaron dentro de la tienda, caí al suelo. No sabíamos lo que ocurría, fue una pesadilla”, explicó A hlam Ibrahim, londinense del barrio de Chelsea.
La policía cerró al tráfico durante un par de horas las grandes avenidas de Regent Street y Oxford Circus, ya iluminadas con las luces navideñas, cuyos comercios celebraban el Black Friday de grandes rebajas.