Perfil (Sabado)

En una presentaci­ón, Cristóbal se incriminó y forzó su propia caída

Su procesamie­nto iba a ser sin prisión preventiva, pero el jueves 14 López y su socio admitieron la venta fraudulent­a. La AFIP apuesta a rematar todos los bienes.

- EMILIA DELFINO/ MARIANO CONFALONIE­RI

El procesamie­nto de Cristóbal López por administra­ción fraudulent­a contra la administra­ción pública estaba listo el 14 de diciembre. Sin prisión preventiva. Pero ese jueves, el empresario kirchneris­ta cavó su propia tumba y sentó la base de su detención.

Su abogado Carlos Beraldi –el que comparte con Cristina Fernández de Kirchner– presentó un escrito pidiendo el levantamie­nto de la inhibición general de bienes del Grupo Indalo, con una confesión: decía que el 20 de octubre había vendido sus acciones al fondo inversor OP, de Ignacio Rosner. Blanqueó un delito. La Justicia había prohibido la venta o cualquier operación que modificara la composició­n del grupo. La venta, entonces, era fraudulent­a. Y escondía, además, un engaño al juez y la AFIP, que es parte querellant­e en la causa.

El documento presentado por Beraldi el jueves 14 iba acompañado originalme­nte de un anexo, con el mismo pedido de levantamie­nto de la inhibición, firmado por Rosner. El juez federal Julián Ercolini se negó a recibir el escrito. “Rosner no es parte de esta causa”, le dijeron al abogado. Una hora y media más tarde, la defensa regresó con un nuevo escrito, esta vez, firmado por López y su socio

El abogado del empresario patagónico blanqueó en un escrito que Cristóbal López había vendido sus acciones a Rosner, pese a la inhibición general de bienes.

Esa venta para la Justicia, es fraudulent­a, y la operación será investigad­a en otro expediente.

El juez Ercolini procesó a López y a su socio De Sousa por administra­ción fraudulent­a en perjuicio del Estado.

La inhibición fue dictada para impedir una modificaci­ón patrimonia­l que esquivara el pago de la deuda. El monto es de más de $ 15 mil millones. Fabián de Sousa. Y la prueba del delito. El juez no lo podía creer, relataron altas fuentes de la causa.

Lo que hizo López, a ojos del juez, fue violar la inhibición de bienes, lo que convierte la operación en una venta fraudulent­a.

Eso obligó a Ercolini a modificar el fallo, incluir los pedidos de detención y solicitar que se abra otra investigac­ión por haber engañado a la Justicia y a la AFIP. Ercolini no termina de entender, según reconstruy­ó PERFIL de fuentes judiciales, por qué Cristóbal se autoincrim­inó al confirmar la venta del grupo sobre el que pesaba una inhibición de bienes. Menos porque su abogado, Beraldi, tiene una trayectori­a que hace imposible pensar en un descuido.

Ercolini suspendió por unos días su fallo y modificó la situación de los empresario­s. Ordenó su prisión preventiva y su captura. Indalo llegó a esta crisis como consecuenc­ia de una deuda de más de 15 mil millones de pesos que generó con la retención indebida del impuesto al combustibl­e. Ese dinero debía ir al fisco. Pero se lo quedó Cristóbal. Con él, fondeó la compra de otras empresas.

El futuro de Indalo está en manos de la AFIP, que tiene identifica­do cada uno de los bienes del grupo, y también los de sus dueños. Presionará para que sean vendidos al mejor postor a través de un remate judicial. En otras palabras, la AFIP no quiere negociació­n. El objetivo final del organismo es dar un mensaje con un “castigo ejemplar” al empresario que amasó fortunas con la complicida­d del kirchneris­mo y que se financió con la retención indebida de impuestos.

Varios factores explican la tormenta que se desató sobre López. Uno de ellos es el enojo de Alberto Abad, el jefe del ente recaudador, que interpretó como una “avivada” de López el intento de venta al fondo inversor OP, y como una forma –fallida– de despegarse de las consecuenc­ias penales de esa maniobra.

Abad, además, cree que logró detectar un potencial factor de “riesgo” de cobro de una deuda multimillo­naria, porque si daba luz verde a la operación por la que se iban a transferir las acciones al fondo inversor de Ignacio Rosner se abría la puerta a una catástrofe de Indalo. “Nunca presentaro­n avales de las inversione­s que dijeron que iban a hacer”, contó una fuente de la AFIP a PERFIL. La Justicia tampoco confió en el plan estratégic­o de Rosner y en el desembarco de la petrolera rusa Lukoil para salvar a Oil Combustibl­es, y por eso no accedió a levantar la inhibición general de bienes.

Cerca de Abad afirman que, si bien no es competenci­a del organismo, buscarán la mejor manera de cobrar la deuda sin provocar la quiebra y los despidos de 4 mil trabajador­es que dependen de manera directa de las diversas empresas de Indalo. Pero el fondo que administra las empresas, que conduce Rosner, se queja de que el organismo no habilita una instancia de negociació­n y, por el contrario, “ejecuta deudas anteriores al cambio en el directorio”. El juez, sin embargo, hará lo posible por abrir una última instancia de negociació­n.

 ?? CEDOC PERFIL ?? SE AUTOINCRIM­INO. López blanqueó el delito en un escrito.
CEDOC PERFIL SE AUTOINCRIM­INO. López blanqueó el delito en un escrito.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina