Nuevas pruebas en la causa contra el titular de Finanzas
El fiscal Rívolo incorporó a la investigación documentos que muestran que fue accionista de firmas offshore y no lo declaró.
L as últimas revelaciones sobre el ministro de Finanzas, Luis Caputo, y sus negocios en paraísos fiscales pueden cambiar el eje de la investigación judicial que intenta determinar si el funcionario omitió maliciosamente parte de su patrimonio al ingresar a la función pública. El ministro ocultó que fue accionista de sociedades offshore creadas para administrar cientos de millones de dólares en paraísos fiscales. Así lo demuestran documentos oficiales de la Securities and Exchange Commision (SEC), la comisión nacional de valores de los Estados Unidos, a los que accedió PERFIL junto al equipo argentino de Paradise Papers.
El fiscal federal Carlos Rívolo incorporó los documentos publicados el domingo a una causa ya iniciada en noviembre. La Justicia debe investigar si Caputo cometió el supuesto delito de omisión maliciosa en las declaraciones juradas de bienes de funcionarios. Se trata de un delito con penas de prisión de hasta dos años, pero requiere probar que se obró con malicia al ocultar la información al Estado.
La oposición también reaccionó esta semana. Mientras el massismo pidió la renuncia del ministro, los diputados del Frente para la Victoria (FpV) Rodolfo Tailhade, Martin Doñate y María Fernanda Raverta se presentaron en el expediente para solicitar que se investiguen las nuevas revelaciones.
La Oficina Anticorrupción emitió un comunicado diciendo que “ha requerido aclaraciones al ministro de Finanzas a fin de reflejar en forma completa la información patrimonial y de intereses. Posteriormente, toda la información fue remitida al fiscal interviniente, Carlos Rívolo”. Sin embargo, ante la consulta del equipo argentino, fuentes del expediente informaron que el organismo no había presentado ninguna aclaración de Caputo ante la Justicia. Solo sus declaraciones juradas. Voceros del ministro no quisieron hacer declaraciones. Caputo sigue negando haber sido accionista de sociedades offshore.
La OA también informó que “requerirá a la SEC, entre otras medidas de prueba, la remisión de la totalidad de la información oficial obrante en su poder”.
El caso Caputo tiene dos capítulos. El equipo argentino de Paradise Papers, que integra PERFIL, reveló en noviembre que el funcionario había gerenciado fondos de inversión en Caimán, justo antes de asumir como ministro de Finanzas. Se trata de Alto Global Fund y Argentina Fund, ambos manejados desde la empresa Noctua, con sedes en Delaware y Miami. La información surgió de la investigación liderada por el Consorcio Internacional de Per iodistas de Investigación (ICIJ) y el dia r io a lemá n Süddeutsche Zeitung.
Entonces, se supo que Caputo nunca informó que había manejado inversiones secretas en paraísos fiscales.
El domingo, el equipo argentino de Paradise Papers publicó una segunda revelación, tras obtener documentos de la comisión de valores de los Estados Unidos. Caputo también ocultó en sus declaraciones juradas que había sido accionista de sociedades offshore, que controlaban Noctua.
Antes de asumir, el funcio- nario fue, entre agosto de 2009 y julio de 2015, el principal accionista de la sociedad Princess International Group, radicada en Caimán. Tenía más del 75% de las acciones. A través de esta compañía, Caputo era el dueño de entre el 50% y el 74% de otra offshore: Affinis Partners II, también radicada en Caimán y dueña de Noctua.
En diciembre de 2015, Caputo presentó una declaración jurada de su patrimonio a diciembre de 2014, cuando todavía era accionista de Princess International Group y manager de Noctua. El funcionario omitió declarar ambos antecedentes. Volvió a ocultar la información en su declaración jurada de 2015.
La participación accionaria de Caputo en estas offshores vuelve a exponer un posible conflicto de intereses. Noctua se dedica a administrar fondos de inversión de alto riesgo en Caimán, que incluyeron bonos de la deuda argentina en default. Luego, en 2016, Caputo estuvo a cargo de la negociación con los fondos buitre que reclamaban el pago de los bonos de la deuda argentina en default. Además, las inversiones que manejó son secretas.
La oposición también reaccionó. El massismo pidió su renuncia y el FpV lo denunció