El ritmo legislativo estará marcado por temas de género en los próximos meses
El debate por la despenalización del aborto será prioridad, pero también se tratará la equidad de género e igualdad laboral que impulsó el presidente Macri.
La “agenda de género”, con el debate por la despenalización del aborto como prioridad, será el foco de atención en el Congreso durante, por lo menos, los próximos cuatro meses. La cuestión es saber ahora cómo se ordenará el debate, ante tanta ansiedad política y mediática.
Por un lado estará la discusión de los distintos proyectos referidos al aborto: ya se presentaron dos a favor –el de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito y el del diputado PRO Sergio Wisky– y dos en contra, de los diputados Juan Brugge e Ivana Bianchi. Por otro lado, se encuentra el tratamiento del proyecto para la “equidad de género e igualdad de oportunidades en el trabajo”, que anunció el presidente Mauricio Macri el Día Internacional de la Mujer.
La iniciativa postula la “igualdad salarial estricta”, fomenta la elaboración de un “código de conducta” en cada empresa para respetar la igualdad de género y exige lo mismo a las asociaciones sindicales. Lo que no dice el borrador, al que tuvo acceso PERFIL, es cómo se constatará que ese respeto sea verificable en la realidad y si habrá sanciones en el caso de que no se cumpla con la norma. Además amplía las licencias por nacimiento o adopción de hijo – que incluye al padre trabajador o a la trabajadora que no haya gestado al hijo– e incorpora la novedad de una licencia de diez días para casos de violencia de género.
La única certeza hasta el momento es que la discusión sobre el aborto comenzará el martes 20 en un plenario de las comisiones de Legislación General, Legislación Penal, Salud y Familia que durante abril y mayo recibirá a médicos, abogados, genetistas, especialistas en familia, temas sociales y salud pública, entre otras áreas, para dar su posición y enriquecer el debate. Si bien se analizó la posibilidad de realizar audiencias públicas para sumar opiniones, fuentes parlamentarias comentaron a PERFIL que esa alter- nativa, que cuenta con varios pasos formales como la realización de reuniones en el interior del país, retrasaría demasiado su tratamiento en el recinto.
Para su debate habrá especial cuidado en el “clima” dentro de las comisiones y el oficialismo ya advirtió que no tolerará la presencia de “barras” como las que ingresaron al Congreso para la aprobación de la reforma previsional. Otros temas. Desde la oposición resaltan la importancia del debate, incluso sorprendidos por la iniciativa de Macri en temas de género, pero por lo bajo también advierten que semejante movida deja en stand by otros ejes de relevancia económica e institucional. El kirchnerismo, por ejemplo, ya trabaja en un texto para impulsar el congelamiento de tarifas y durante la semana propuso que el jefe de la AFIP sea designado mediante el mecanismo de participación ciudadana y que se imponga una incompatibilidad con ser titular o administrador de depósitos o títulos en paraísos fiscales. Los reclamos del interbloque Argentina Federal, que responde a los gobernadores peronistas, también deberán ser tenidos en cuenta si se busca negociar adhesiones para los textos respaldados por el oficialismo.
Lo cierto es que la primera actividad formal de la Cámara de Diputados será el próximo miércoles cuando el jefe de Gabinete, Marcos Peña, asista a dar su primer informe de gestión del año.
Peña tiene un equipo especial que elabora los puntos centrales de su discurso y luego responde por escrito el resto de las preguntas realizadas por los legisladores. En tanto, para el miércoles 21 de marzo se espera la primera sesión para tratar los proyectos de ley que reemplazan al polémico megadecreto presidencial.