UN PRODIGIO CULTURAL
Suavemente, el Italia se desliza por el lago de Lugano con dirección al monte San Salvatore. A la izquierda, mansiones modernas y viejas casas de piedra se aferran a las empinadas pendientes de la localidad suiza de Morcote. A la derecha del barco de vapor se encuentra Italia. Raras veces los dos países, tan diferentes, se acercan tanto entre sí como en el lago de Lugano. En el extremo sur del cantón del Tesino los dos países se fusionan para formar una sola región, con el mismo idioma, la misma cultura y el mismo paisaje. Muchas veces uno no sabe en qué país está desembarcando, porque en ambos lados se habla italiano. Para orientarse, conviene echar un vistazo a los menús de los restaurantes. Los platos son iguales, pero los precios son muy diferentes. En el municipio suizo de Caslano, la pasta es el doble de cara que en la población italiana situada enfrente, Ponte Tresa. El lago de Lugano es la perla del sur de Suiza y, como se sabe, las perlas no son baratas. Lugano lleva atrayendo desde hace décadas a personas adineradas. Ferraris pasan a toda velocidad con sus motores bramando por el Lungolago, el paseo que bordea el lago de Lugano. En los escaparates de las joyerías en la Via Nassa, la mayoría de los precios tienen al menos cinco dígitos. Por tanto, no es de extrañar que muchos hoteles situados a orillas del lago de Lugano sean muy elegantes. En cambio, el lago Mayor es mucho más grande. Solo la parte norte está situada en Suiza y el resto, al sur de las islas de Brissago, en Italia. El lago Mayor es un destino turístico menos exclusivo, también en la parte suiza. Las excepciones son el festival de cine en la Piazza Grande de Locarno y la localidad de Ascona. En las pendientes del Monte Verità hay muchas mansiones de millones de euros. Alrededor del campo de golf de Ascona hay un hotel de lujo tras otro. En esta zona, donde se producen vinos de la variedad de uva Merlot y se cultiva arroz para risotto, hay desde luego varios restaurantes de primera categoría. El mejor de todo el sur de Suiza es el Ecco, de dos estrellas, en el hotel Giardino, famoso por su excelente cocina mediterránea con influencias japonesas. Los dos lagos en la frontera entre Suiza e Italia son lugares de ensueño para los aficionados a los deportes acuáticos, y las montañas aledañas son destinos fantásticos para senderistas y ciclistas. En los alrededores
A la izquierda, Suiza; a la derecha, Italia. Ambos países comparten agua, tierra, lengua y paisajes en los lagos Lugano y Mayor.