A priori los agroquímicos se ven peligrosos
Sin embargo, de las intoxicaciones registradas por un centro toxicológico de Rosario las 3/4 partes de los casos reportados son por intoxicaciones con productos de uso domiciliario.
“No existen agroquímicos seguros sino formas seguras de usarlos”.
El INTA Marcos Juárez fue sede del 2º Congreso Nacional de Fitosanitarios organizado por Casafe y otros institutos nacionales y provinciales. Uno de los paneles más convocantes reunió a médicos y especialistas en salud. Cada uno a su tiempo analizó qué pasa con los fitosanitarios. Y las conclusiones con elocuentes. La doctora Silvia Martínez del centro de Toxicología, Asesoramiento y Servicios (TAS) de Rosario, dividió a los problemas de intoxicación de la comunidad en dos segmentos: uno, el de tipo domiciliario que representa las ¾ partes de las consultas, mientras que las provenientes por el uso de fitosanitarios representan 1/3 de ellas. “Nosotros utilizamos en nuestra casa los domi-sanitarios de la misma manera que se utilizan en el campo, con muchas menos información o educación y con consecuencias mayores, mientras que en el campo la mayoría de los productos que se utilizan son de banda verde o clase 4”, explicó. Detalló que no existen agroquímicos seguros, sino formas seguras de utilizarlos, para explicar que las intoxicaciones se producen cuando existe exposición a uno o varios tóxicos por negligencia.
En cuanto al uso de glifosato definió que los grados de toxicidad se dividen en leve, moderada y severa, situación que dependerá de la dosis de exposición: “El cuadro leve se produce en el campo por contacto cutáneo o inhalación, pero por accidente; mientras que un cuadro grave o letal, por lo general es un intento de suicidio”, explicó. Otras sustancias que suelen aparecer con casos de intoxicación son los piretroides y el paraquat. Incluyó también como agente de intoxicación el uso del ibuprofeno y expuso el caso de un chiquito que se tomó medio frasco de este producto o el caso de personas que toman varios comprimidos juntos.
“El manejo de la intoxicación se debe hacer con un buen diagnóstico, precoz, adecuado y certero, clínica y estudios de laboratorio, ciencia y sobre todo sentido común y, evitar los diagnósticos errados por intoxicación con plaguicidas, como ocurre en ciertos casos con tratamientos inadecuados y peligrosos”, alertó.
El ministro de Salud de Córdoba, el médico Martín Alonso puso el foco sobre la preocupación de la gente por el uso de los agroquímicos y en ese sentido sugirió establecer acuerdos con la comunidad para que acepte la actividad agrícola del mejor modo posible, porque trae riqueza al país, pero para eso “tenemos que generar confianza en la gente que no está ligada al quehacer del campo, pese a que vive en el campo. Partimos de la base de que la gente tiene un conocimiento ‘a priori’ sobre la toxicidad de los agroquímicos y cree que producen cáncer”.
Alonso explicó que en Córdoba, se llevan registros sobre la presencia de pacientes con cáncer que suman unos 104.000 casos entre 2004 y 2015, con un 50% en hombres y 50% en mujeres, que a nivel país representa una tasa de incidencia de 216 y para Córdoba es de 212. En otras palabras de cada 100.000 personas, 200 se enferman de cáncer por año. Esta enfermedad es la segunda causa de muerte y entre 25 y 30 por ciento de la población muere por ella. Las causas indican que 1 de cada 3 personas adquieren esta enfermedad y en cuanto a las causas 1 de cada 10 tienen cáncer de mamas; cólon y recto 1 de cada 25; de pulmón 1 de cada 27 y de próstata 1 de cada 11.
“En el caso del glifosato es un producto que debe ser bien manejado y no deberían representar ningún problema ni para el aplicador, ni para la sociedad. La realidad del problema es que puede existir un manejo un poco laxo de las cuestiones regulatorias, aunque nuestra provincia avanzó mucho en el tema y sigue trabajando”, manifestó el médico.