Piden reabrir causa contra fiscales que investigaron al jefe de la AFI
El fallo también confirmó el rol del titular de los espías como querellante en el expediente
La Sala II de la Cámara Federal de Apelaciones ordenó ayer la reapertura de la causa contra los fiscales Sergio Rodríguez y Federico Delgado, y confirmó el rol del titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), Gustavo Arribas, como querellante en el expediente. Delgado y Rodríguez habían sido denunciados en abril pasado por el juez Claudio Bonadio, quien sostuvo que habían cometido delitos al recibir declaración testimonial sin tomarle juramento al financista brasileño Leonardo Meirelles, involucrado en el Lava Jato.
Esa denuncia recayó en el juzgado de Daniel Rafecas y la fiscalía de Gerardo Pollicita, quienes coincidieron en desestimarla, lo que ayer fue revertido por el tribunal de alzada.
En 2017 trascendió que Arribas, amigo de Mauricio Macri, había recibido en 2013, después de que se reactivara un contrato con Odebrecht, una serie de pagos realizados por Meirelles, condenado por el Lava Jato y posteriormente arrepentido y colaborador de las autoridades brasileñas. La Justicia argentina comenzó a investigar los hechos y en mayo del año pasado Meirelles declaró haber transferido desde sus empresas en Hong Kong 850 mil dólares a una cuenta de Arribas, quien se- gún las acusaciones tenía una estrecha relación con altos cargos de Buenos Aires. El jefe de los espías denunció a Meirelles y solo reconoció el pago de unos 70.500 dólares procedente de Hong Kong, que correspondían a la venta de un inmueble en San Pablo.
La resolución de ayer fue por mayoría de los jueces Leopoldo Bruglia y Mariano Llorens, con la disidencia de Martín Irurzun y causó sorpresa en Comodoro Py. “No puede soslayarse que las circunstancias y la forma en que se produjeron las declaraciones de Leonardo Meirelles y Alberto Youseff ameritan cuanto menos ahondar la pesquisa a los efectos de descartar cualquier posible conducta ilícita que se haya producido en dicho acto y que podría llegar a exceder el mero marco de discusión sobre la debida aplicación de una norma procesal”, sostuvo Bruglia en su voto.
Llorens adhirió a esa postura y agregó que “la base de esa investigación, que no es ni más ni menos que la reconstrucción completa de un acontecimiento histórico que tendrá –o no– significación jurídica, que vincule –o desvincule- a una persona al proceso demanda, inexorablemente, la posibilidad de que, tanto la acusación como la defensa puedan agotar las medidas que estimen pertinentes para el esclarecimiento de los hechos”. En tanto Irurzun sostuvo que la querella “no ha alega- do ninguna variante de los hechos –ni menos todavía aportado algún indicio– que exceda de su cuestionamiento acerca de la forma procesal escogida por los fiscales Delgado y Rodríguez”.