El sistema de salud, en alerta ante posibles amenazas
La Ciudad diseñó una estrategia sanitaria para la atención de las comitivas extranjeras, manifestantes o policías que pudiesen resultar heridos en el marco de la cumbre. Cómo es el protocolo para cuidar a los líderes mundiales.
Hospitales en estado de “alerta rojo”, guardas reforzadas, médicos especializados, licencias suspendidas, disponibilidad de camas, ambulancias acompañando a las comitivas, dos helicópteros listos para traslados, antídotos para ataques químicos, biológicos o con gases, y refuerzos en los bancos de sangre de cada uno de los establecimientos sanitarios afectados, son algunas de las medidas que se adoptaron desde el Ministerio de Salud porteño para la atención tanto de los mandatarios extranjeros, como de los manifestantes o efectivos de seguridad mientras se lleve a cabo la cumbre del G20 en la Ciudad.
Los hospitales en estado de Alerta Rojo afectados al plan de emergencias son los Generales de Agudos Argerich, Fernández, Pirovano, Tornú y Santojanni. Y los especializados Ricardo Gutiérrez, Santa Lucía y Del Quemado. Mientras que los hospitales Durand, Ramos Mejía y Rivadavia permanecerán en estado de alerta Naranja. El resto de la red de hospitales públicos porteños, se mantendrán en alerta amarilla. La estrategia sanitaria se mantendrá hasta el domingo a la noche y se enmarca en el Plan Director de respuesta a emergencias y amenazas a Buenos Aires.
“El plan se estableció trabajando con una hipótesis de posible conflicto que genere múltiples víctimas o heridos. La estrategia se basó en el estudio de situaciones similares anteriores. En este caso, se estudió la edición anterior de la Cumbre del G20 que se realizó el año pasado en Hamburgo, Alemania que terminó con 400 policías heridos”, aseguró Sergio Auger, Director General de Hospitales porteños. “Se busca alcanzar la mayor operatividad desde los hospitales afectados”, agregó.
Consultado sobre la decisión de postergar operaciones o derivar pacientes Auger señaló que “solo se reprogramaron las cirugías que no revestían riesgo de vida para el paciente. Al tiempo de agregar que “no se suspendieron cirugías cardiovasculares ni de aneurismas ni de pacientes con enfermedades terminales. Lo mismo que la atención de alguna emergencia no relacionada con el G20. No están suspendidas”, aseguró Auger en su charla con PERFIL.
El SAME tampoco quedó exento de prestar servicios durante la cumbre del G20. En este caso, las ambulancias del sistema de emergencias acompañaron desde Ezeiza hasta el hotel donde se alojaban a cada una de las comitivas presidenciales que arribaron al país desde el jueves pasado. “A mí me tocó acompañar al presidente Vladimir Putin con una unidad de terapia intensiva”, afirmó Alberto Crescenti, director del servicio de emergencias. “En el Teatro Colón también montamos una especie de terapia intensiva”, agregó, por último, el emergentólogo.
Se reprogramaron cirugías y se derivan de las guardias pacientes “sin riesgo de vida”