Washington se apresta a declarar la derrota final del califato de EI
Estados Unidos hará en breve un anuncio sobre el fin del “califato” instaurado por Estado Islámico (EI), mientras los yihadistas continúan defendiendo su último reducto en Siria.
“Tenemos grandes anuncios vinculados con Siria y nuestro éxito en la erradicación del califato, que serán anunciados en las próximas 24 horas”, dijo ayer Donald Trump.
Las rebeldes Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), apoyadas por Estados Unidos, vienen cercando a los yihadistas desde sept iembre del año pasado y actualmente hay unos cientos de miembros de EI acorralados en un área de alrededor de un kilómetro cuadrado.
Los últimos yihadistas resisten en un área de un kilómetro cuadrado en Siria
Califato. A mediados de 2014 el líder de EI, Abu Bakr al Bagdadi, proclamó un “califato” en un territorio del tamaño del Reino Unido y en el que vivían millones de personas.
Pero las sucesivas ofensivas desarrolladas en su contra en Irak y Siria destruyeron el proto-estado, que perdió sus principales ciudades una tras otra y desde fines de 2017 quedó confinado a su base de po- der tradicional en el valle del Eufrates.
El anuncio llega después de que Trump sorprendiera a aliados y a su propio gobierno al declarar en diciembre que Estados Unidos retiraría a todas sus tropas de Siria.
Ese plan, que provocó la renuncia del secretario de Defensa Jim Mattis, podría acelerarse si se declara la victoria sobre EI.
Kurdos. El Pentágono presionó ayer a sus socios de la coalición contra EI para que manden tropas al norte de Siria y proteger así a kurdos, una vez que los soldados nor teamericanos abandonen la región. Los 13 ministros de Defensa de los principales países de la coalición internacional antiyihadista, que se reunieron ayer al margen de la Conferencia sobre la Seguridad de Múnich, buscan desde hace semanas una respuesta al rompecabezas que supone la retirada del principal contribuyente a esta alianza militar.
El objetivo es doble: no dejar solos a los kurdos y mantener un esfuerzo antiterrorista para evitar que vuelva EI, que pasó a la clandestinidad.