“Claro que podemos ganar en primera vuelta”, sostiene Rossi
El diputado nacional Agustín Rossi lleva más de una década acompañando a Cristina Kirchner. La mayor parte de ese tiempo fue jefe del bloque del Frente para la Victoria, el mismo que ostenta hoy. El santafesino se acopló a un acuerdo de unidad en su provincia que facilitó el triunfo del senador Omar Perotti, que recuperó para el peronismo una provincia que estuvo en manos del socialismo por 12 años. Entusiasmado por ese batacazo, Rossi adelanta: “Podemos ganar en primera vuelta”.
—¿El Frente de Todos puede ganar la elección?
—Claro que podemos ganar y podemos ganar en primera vuelta. No soy de los que cree que las elecciones provinciales hay que trasladarlas inmediatamente al escenario nacional pero no soy ciego: cada una de ellas tuvo componentes nacionales. No se explica si no que en Santa Fe, Cambiemos pasó del 35 por ciento en 2017 al 20 en 2019. Hace dos años la marca Cambiemos subía a los candidatos y hoy los baja. Los argentinos encontraron en las elecciones provinciales una manera de castigar al gobierno nacional. Y por eso el oficialismo salió tercero en la mayoría de ellas. Y perdió 20 puntos en todas.
—¿Hay lugar para la ‘avenida del medio’?
—Creo que el escenario es de polarización absoluta y tenemos una oposición que nadie imaginaba que iba a estar como está hace un año atrás. Está muy unida detrás de Alberto y Cristina.
—¿Qué piensa de la incorporación de Pichetto como candidato a vice de Macri?
—Pichetto fue la cuarta opción, detrás de Sanz, Urtubey y Schiaretti. Es una incorporación que abre hacia la derecha, porque el discurso de Pichetto es un discurso a lo “Bolsonaro”: mano dura contra inmigrantes y de reivindicación de las Fuerzas Armadas. Trataron de equilibrar lo que hizo Cristina con Alberto. Pero esta operación política fue de mucho menor impacto.
—En caso de que gane el Frente de Todos, ¿va a gobernar Alberto o Cristina?
—Alberto va a ser el presidente, quien decida la orientación del gobierno, los ministros y los funcionarios que lo acompañen. Para Alberto, el desafío es convertir eso que se plantea como un disvalor en una virtud: mantener una vicepresidenta que no esté pintada al óleo, que tenga el nivel de liderazgo que tiene Cristina.
—¿Es el “bolsillo” lo que le da al kirchnerismo la posibilidad de ganar?
—No solo el bolsillo. Lo económico es importante, pero no es todo. Hay una falta de credibilidad de Macri, aunque sin duda que la situación económica es lo que más les preocupa a todos los argentinos.
—¿Qué piensa del temor de los mercados y el FMI de que vuelva el kirchnerismo?
—Nosotros no somos el partido del default. Al Fondo se le pagó siempre. Néstor pagó religiosamente hasta que en 2005 saldó toda la deuda con el Fondo. Se pueden generar mejores condiciones en términos de los plazos para que Argentina pueda volver a crecer, para que la deuda no sea un ahogo. Renegociar no es una mala palabra. Este gobierno renegoció el acuerdo tres veces. No hay que poner ningún dramatismo. Lo peor que le puede pasar a la Argentina es caer en default. Ahora, este acuerdo con el Fondo es un acuerdo insostenible para cualquier gobierno.