Alberto está convencido de que ganará y calcula más de cinco puntos de diferencia
El precandidato del Frente de Todos descree de las encuestas que circulan. Celebra haber podido instalar el debate económico y minimiza la polémica con la científica del Conicet.
Alberto Fernández volvió a Córdoba convencido de que la tarea de acortar la distancia que Mauricio Macri consiguió sacar en este territorio en 2015 está cumplida. En el búnker de campaña se muestran inmóviles ante las últimas encuestas que señalan un acercamiento de Juntos por el Cambio a la fórmula del Frente de Todos. También minimizan la polémica que se generó con la científica Sandra Pitta y repiten que el 11 de agosto darán la sorpresa en las urnas. En los equipos de campaña del candidato presidencial y de su compañera de fórmula, Cristina Kirchner, coinciden en que ganarán la elección por, al menos, cinco puntos.
Fernández celebra haber podido instalar la agenda económica en el último tramo de la campaña. Desde Córdoba anunció que, en caso de ganar los comicios presidenciales, va a “desdolarizar las tarifas”. En una conferencia de prensa en Bell Ville advirtió que “no es posible que haya un sector de la economía tan importante como la energía dolarizado en un país que produce y consume en pesos”. Y agregó: “No tiene sentido que tengamos luz si las pequeñas y medianas empresas no pueden pagar. Hoy leía que cayó el consumo de luz y Edesur ganó no sé cuántos millones de pesos, eso es que el negocio es para unos pocos”.
“Te amamos”, le repetían dos señoras cuando Alberto se bajó del auto a la salida del predio de Aceitera Deheza, propiedad del ex senador y empresario Roberto Urquía. “Ahí va el Capitán Beto”, tenían inscripto las remeras con el rostro del candidato que las vecinas le entregaron.
El precandidato a presidente llegó al segundo distrito con mayor cantidad de electores del país junto al diputado Felipe Solá, quien se metió de lleno en la campaña y ahora organiza los acuerdos con los gobernadores y recorre distintos territorios con él. Al llegar, se volvió a mostrar con el jefe del bloque de senadores nacionales del peronismo y presidente del Partido Justicialista de Córdoba, Carlos Caserio, quien le acercó a distintos intendentes peronistas que en las elecciones de 2015 se mantuvieron al margen de la pelea presidencial.
El candidato del Frente de Todos conseguirá hoy otra foto importante, ya que en su paso por Río Cuarto se reunirá con el intendente Juan Manuel Llamosas. Este jefe distrital respondía las órdenes del gobernador Juan Schiaretti de mostrarse prescindente de la pelea presidencial y, en cambio, pedir por el voto de la boleta corta de los legisladores de Hacemos por Córdoba. Sin embargo, a una semana de la elección, dará un gesto de apoyo al permitir una imagen con Fernández.
Por esta foto, el postulante presidencial no estará en el acto de Cristina Kirchner en Malvinas Argentinas. Allí la candidata a vicepresidenta presentará el libro Sinceramente y tendrá una de las imágenes más importantes de la campaña bonaerense. En el evento estarán presentes el candidato a gobernador Axel Kicillof; su compañera de fórmula, Verónica Magario, y el postulante a primer diputado nacional, Sergio Massa.
La última semana de campaña, Alberto la dedicará a recorrer el Conurbano. Pero dedicará gran parte de su tiempo a hacer entrevistas en medios de comunicación. Todos los candidatos se reunirán en el cierre de campaña en Rosario el próximo miércoles. Allí, también participarán de la foto los gobernadores peronistas que abandonaron la tercera vía para apoyar la fórmula del Frente de Todos.
Fernández cambió una foto con Cristina por una con un intendente cordobés