Bolsonaro echa de su gobierno al zar anti deforestación
La política ambiental de la presidencia de Jair Bolsonaro es materia de continuas críticas. El pasado mes de julio se sumaron evidencias de que la despreocupación también puede producir daños, cuando se conocieron imágenes provistas por el Instituto de Investigaciones Espaciales (INPE) que prueban la incipiente deforestación del Amazonas. Ayer, la situación tuvo una escalada, cuando el propio director del instituto, Ricardo Galvao, un físico de 71 años, dijo que había sido destitituido de su puesto. El mismo presidente había encendido la polémica y la discusión pública cuando tildó al científico de “cobarde”.
Galvao había cuestionado públicamente alBolsonaro, comparándolo con “un chico de 14 años”. Ayer el funcionario explicó los motivos de su salida del Ejecutivo: “Mis palabras sobre el presidente generaron molestia, entonces seré destituido”. Lo dijo tras reunirse con el ministro de Ciencia y Tecnología, Marcos Pontes.
Las reacciones de los grupos ambientalistas no se hicieron esperar. Los primeros que reaccionaron fueron los miembres de Greenpeace, que culparon precisamente al presidente por las políticas públicas en detrimento de la naturaleza. “Bolsonaro sabe que su gobierno es el principal responsable del actual escenario de destrucción de la Amazonía. La destitución del director del INPE no es más que un acto de venganza contra quien muestra la verdad”, afirmó Márcio Astrini, coordinador de Políticas Públicas de la ONG.
El presidente brasileño echó más leña al fuego unos días antes al “acusar” a Galvao de participar de una ONG, como si se tratara de un demérito o una forma de traición al gobierno. “Nuestra sensación es que eso no coincide con la verdad. Hasta parece que [el presidente del INPE] está al servicio de alguna ONG”, dijo Bolsonaro, en un desayuno con corresponsales extranjeros.
Al día siguiente, Galvao replicó, afirmando que Bolsonaro “hizo acusaciones indebidas contra personas del máximo nivel de la ciencia brasileña” y comparó las sospechas emitidas por el jefe de Estado con “una broma de un chico de 14 años, incompatible con un presidente de la República”.
El funcionario había dicho que una broma de un chico de 14 años
El jueves Bolsonaro había cuestionado los datos del INPE. “Si Galvao rompe la confianza, será destituido sumariamente”, había amenazado. Horas después el funcionario dejaría el Gobierno.
“Los datos sobre la desforestación revelan lo que todos saben: que está avanzando de manera muy importante. Y crean un problema para el gobierno, porque la presión nacional e internacional es muy grande”, dijo a la AFP João Paulo Capobianco, vicepresidente del Instituto Democracia y Sustentabilidad y ex viceministro de Medio Ambiente.