El trasfondo del acuerdo entre el jefe de Gobierno porteño y el liberal Espert
El acuerdo entre Horacio Rodríguez Larreta y José Luis Espert fue otra muestra de la debilidad presidencial. Cerca del alcalde porteño subrayaron el mensaje implícito en el arreglo con el candidato a presidente del Frente Despertar: que Rodríguez Larreta encarna un liderazgo amplio y pragmático, capaz de sumar al socialista Roy Cortina, al radical Martín Lousteau y a un ultra-liberal como Espert. En concreto, que apuesta por una estrategia prácticamente opuesta a la que desplegó Mauricio Macri, de la mano de Marcos Peña.
Desde el gobierno porteño, el autor intelectual de tirar líneas al espacio de Espert fue el vicealcalde Diego Santilli. Antes de la reunión del miércoles pasado en la sede del gobierno, donde Larreta, Espert, Santilli y Luis Rosales sellaron la negociación con una foto, existieron dos encuentros previos. Uno se hizo en la casa del compañero de fórmula de Espert: el periodista Luis Rosales.
El acuerdo no encierra compromisos institucionales (las boletas de Espert ya no podrán ir pegadas a la de Larreta). Es más bien un acto simbólico, que podría ayudar al alcalde a evitar el ballottage contra Matías Lammens. En la Capital, donde Despertar no cuenta con postulante que compita con Larreta, Espert sacó 3,6 puntos.
El economista tampoco se llevó promesas de cargos o contratos a futuro por parte del alcalde. Y ni siquiera se comprometió a rebajar sus críticas hacia el presidente. “Que Macri haya fracasado económicamente es porque no hizo lo que tenía que hacer”, opinó Espert, al día siguiente del pacto distrital. También le achacó a la Casa Rosada haber generado 500 mil nuevos pobres, tras la última suba de la inflación. De hecho, en la reunión del miércoles, circularon los cuestionamientos hacia la gestión de Macri.
“El resultado de Nación y Provincia es irreversible. Pero en Capital podemos tallar. Así, de paso, desactivamos la idea de que somos funcionales al kirchnerismo”, revela un operador de Espert.