“No te duermas porque ahora termino con vos”
El viernes 8 de marzo de 2019 a la noche, justo en el Día Internacional de la Mujer, escuchó la última amenaza: “No te duermas porque ahora termino con vos y tus hijos”, le dijo su marido. No era la primera vez. Pero en esta oportunidad el miedo no fue el de siempre. Paola temió por la vida de sus hijos. Agarró un cuchillo y lo atacó. Milagros, su hija mayor, también intervino. Fueron 185 puñaladas, la gran mayoría superficiales. El hombre murió en el lugar y Paola llamó a la policía para entregarse. La policía encontró al hombre cubierto con una frazada, ya sin vida.
La familia de las acusadas se movilizó a la fiscalía para que fueran liberadas. Una y otra vez repetían que no eran asesinas, sino víctimas de un hombre que las había violentado durante años. Finalmente recuperaron la libertad. Paola estuvo alejada de sus otros tres hijos durante varios meses después del crimen. “En noviembre pasado se resolvió que volvieran a vivir con ellas, así que están juntos en la misma casa”, resaltó el abogado de las acusadas, Andrés López. “Necesitan –continuó– que alguien del Estado intervenga y vean que hay una mujer con cuatro chicos que está absolutamente vulnerable e imputados por un delito muy grave cuando en realidad tuvo que defenderse por responsabilidad del Estado, que no estuvo presente cuando ella denunció lo que estaba padeciendo”.