“En el Gobierno, cuando hay discusiones económicas, si no se llega a un consenso, la decisión final la toma Martín Guzmán”
—Hay versiones sobre la creación de un megaministerio después de las elecciones conducido por Sergio Massa o por Cecilia Todesca para el período poselectoral. ¿Se requiere una coordinación superestructural?
—Circulan decenas de versiones. Creo en la necesidad de coordinar las políticas económicas. Se puede hacer de varias maneras. Una es con un megaministerio de Economía. Eso puede generar una coordinación más estricta; pero puede perderse diversidad de agenda y agilidad de las agendas sectoriales. La otra alternativa, que eligió Alberto Fernández, es generar un gabinete económico. Que tiene un coordinador. La persona que tiene la última palabra es el ministro de Economía. Cuando hay diferentes discusiones, si no se llega a un punto de consenso, la decisión la toma el ministro de Economía. Pero la verdad es que discutimos muchos temas y tomamos decisiones en conjunto. El ATP surgió de ahí. De discutir durante largas horas cómo hacíamos para enfrentar una crisis sin antecedentes. Y la experiencia fue excelente: en pocos días planificamos una política, la diseñamos e implementamos. Empezó a principios de abril, y a principios de mayo la gente tenía depositado el sueldo en su cuenta. Requirió una coordinación enorme. Se hizo con un gabinete económico fuertemente coordinado. Allí, jugaron un papel clave el jefe de Gabinete y la vicejefa, una economista que conoce muchísimo la realidad argentina y el Estado.