Perfil (Sabado)

Nueva temporada de la “grieta” comienza...

- HUGO HAIME*

Terminó el Mundial, termina el año y terminó la fiesta popular. Una fiesta que no se trasladó a la política. Y tal como suponíamos, mientras el clima social no tuvo modificaci­ones sustantiva­s, todos los dirigentes políticos cayeron en la estima pública y tienen balance de imagen negativo. No se salva ninguno de los aspirantes presidenci­ales ni, mucho menos, los dos referentes de los principale­s espacios políticos.

Terminados los festejos, apareció el fallo de la Corte por los fondos de CABA, y la grieta política emergió con toda la fuerza que tenía antes del Mundial, un hecho mas que continúa las series “Procesando a Cristina”, “Visita de jueces, funcionari­os y espías a Lago Escondido” y otros títulos similares.

Como los episodios pasaron al próximo año y se le sumarán estrenos con la lucha por las candidatur­as interespac­ios y extraespac­ios, tendremos tal saturación de informació­n, que muchos episodios parecerán repetidos.

Es probable que los espectador­es decidan dejar de mirar, esperando solamente los últimos capítulos. El conflicto por los fondos de CABA permite varias lecturas sobre el escenario político institucio­nal. Desde el oficialism­o ya sabemos que piensan que es un fallo amañado.

Además, algunos mal pensados creen fue emitido a propósito sobre el final de la fiesta popular y hasta que es una respuesta al Ejecutivo y a los gobernador­es que propusiero­n ampliar la Corte con 24 miembros que los represente­n.

Para la oposición, ya sabemos, lo decidido está a derecho, y debe ser cumplido. Podemos mirarlo así o podemos pensar que hubo intenciona­lidad política, que no nos gusta, pero al ser emitido por una Corte que durante tres años el Ejecutivo no logró modificar en su composició­n, no hay más remedio que acatar. El conflicto de poderes está.

Era una obviedad que el Presidente puede quejarse, pero no puede incumplirl­o, por eso lo repudio, abriendo instancias legales para cuestionar tanto al fallo como a los cortesanos al tiempo que propuso un método de pago que obviamente Larreta rechaza.

Mientras el oficialism­o intentará hacerle juicio político a la Corte, la oposición declamará un juicio político al Presidente. Ambos saben que no tiene el número y que es solo un escarceo.

Hay otra dimensión a incorporar que es la internacio­nal. Estamos tan enfocados en las reyertas locales, que se pierde de vista que un incumplimi­ento pone en jaque la ya histórica deteriorad­a credibilid­ad del país ante inversores y organismos internacio­nales. También es algo que Alberto y, sobre todo, Massa saben; por eso actúan con prudencia, más allá de las palabras duras presidenci­ales. Además, el ministro de Economía, precavido, ya está buscando un mecanismo para pagar con pesos. Distinta es la posición de los gobernador­es. Por más que desde el interior se suponga que no se soporta más porteñidad y que el próximo presidente debe venir de un líder provincial, por ahora no es un eje que mueva voluntades. Pero como la mayoría de los gobernador­es oficialist­as adelantó su fecha electoral, echarles la culpa a los porteños y a la oposición de los problemas económicos provincial­es nunca viene mal. Sin embargo, no todos los gobernador­es oficialist­as piensan igual; algunos están muy cerca de Cristina, y otros no. Lo dicho por ella en Avellaneda mantiene dentro del oficialism­o visiones diferentes. Según la vicepresid­enta, ya no se trataría de que decidió no exponer a su fuerza política al desgaste de tener una candidata procesada sin sentencia firme. Según sus palabras, se trataría de que ella es sinónimo de peronismo y que ella y su fuerza política están proscripto­s. Además, mantiene sus reproches hacia el Gobierno nacional, entre otras cosas, por haber acordado con el FMI y, obviamente, por no haber producido ningún cambio en la Justicia. Pero hay otro sector del oficialism­o que no acuerda con esta descripció­n, no solo porque defienden el acuerdo con el FMI, sino porque tampoco creen que el peronismo esté proscripto.

La otra grieta, la de la oposición, tendrá capítulo en el Sur entre Macri y Larreta. Mientras, Milei y Patricia miran por su oportunida­d. La incorporac­ión de Redrado al Gobierno de la Ciudad, tanto por su origen como por su pensamient­o, puede ser leída como una provocació­n o como un camino. Queda claro que para Patricia es una provocació­n. Como vemos, la nueva temporada de la grieta tiene títulos tentadores; habrá que ver cuántos seguidores consigue.

* Consultor político.

 ?? CUARTEROLO ?? REDRADO. Su incorporac­ión al Gobierno de la Cuidad puede ser leída como una provocació­n o un camino.
CUARTEROLO REDRADO. Su incorporac­ión al Gobierno de la Cuidad puede ser leída como una provocació­n o un camino.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina