EL ÁLBUM DE MAURO SZETA
El periodista de Corta por Lozano compartió fotos de cuando era chico y habló de Enrique, su papá nacido en Rusia y que llegó escapando de la guerra; de su hermano, el fifilósofo Darío Sztajnszrajber y de cómo se inició en el periodismo de policiales
Mauro Sztajnszrajber, más conocido como Mauro Szeta (47), nació el 22 de marzo de 1973 en una clínica porteña y llegó para completar la familia que conformaban papá Enrique, mamá Felisa y su hermano Darío, que por entonces era un niño de cinco años. “Mi papá, Enrique, nació en Rusia y se vino a los 5 años escapando de la guerra con su familia. Siempre fue comerciante, pasó por muchos rubros: primero fue técnico en televisión y reparaba televisores, luego fue encargado durante 15 años en un cotillón y al final se abrió por su cuenta y pasó a ser un distribuidor regional de velas. Mi mamá, Felisa, tuvo una galletitería, luego una licorería y al final un local de venta de productos regionales e importados. Hoy están los dos jubilados y los amo”, cuenta a Pronto el periodista, que actualmente se luce en el noticiero de los mediodías de Telefe y en Cortá por Lozano, el magazine que conduce Verónica Lozano por la misma pantalla. Szeta se crió en Villa Crespo y pasó toda la infancia en un edificio de Corrientes al 5500. Cursó la primaria en la Escuela Francisco Victoria N° 17 en Villa Crespo y fue un buen alumno. “Tengo un recuerdo de la infancia hermoso. Una vez un compañero, de apellido Pusineri, me encerró en el gabinete de animales embalsamados durante toda la tarde y me terminó rescatando una ordenanza del colegio, que escuchó mis gritos y me salvó. Tenía 11 años y conviví unas cuantas horas con los animales embalsamados. Era buen alumno y hasta llegué a ser abanderado en algún grado inferior. Viajaba
solo en colectivo a la escuela a los 7 años: tomaba la línea 65, que me dejaba a una cuadra del colegio y mi papá me enseñó a poner las monedas en las máquinas de los viejos colectivos”, relata. ¿Cómo era el vínculo con su hermano, el filósofo Darío Sztajnszrajber? El lo cuenta así: “Tiene 5 años más que yo y recién nos hicimos amigos más de grandes. Empezamos a vincularnos mejor porque de chicos peleábamos mucho y él me ganaba siempre al fútbol. Los dos somos hinchas de Estudiantes de La Plata y nos hicimos fanáticos de grandes. Un día mi hermano hizo una obra de teatro en La Plata, luego lo invitaron a la cancha, se enganchó con un partido de Estudiantes y le gustó la filosofía del equipo de ser bueno en defensa y de cuidar el arco como patrón principal de juego. Me llevó un día, también me enganché y me hice hincha a los veintipico, totalmente atemporal. Soy súper fanático, soy socio del club y antes de la cuarentena iba a la cancha cada vez que podía cuando jugaba de local”. El periodista especializado en policiales recién se independizó de la casa paterna a los 24 años. “A esa edad recién me mudé solo porque me compré mi primer departamento. Laburaba de adicionista en un restaurante, que son los que cobran y llevan la cuenta a la mesa. Era un restaurante en Once que vendía comida de la colectividad judía y platos específicos y a la par estudiaba periodismo en el Instituto Grafotécnico. Me compré mi casa de joven porque como vivía con mis viejos, todo lo que ganaba en el restaurante me lo ahorraba completo; era un sueldo dolarizado en esa época y en 14 meses me compré un monoambiente amplio y me fui a vivir solo a los
24. Además de adicionista, fui contador de gente en los cines; mejor dicho control de cine. ¿Cómo era ese trabajo? Me habían dado un cuenta ganado y tenía que contar la cantidad de espectadores que entraba a cada sala. Me paraba al lado del que cortaba el ticket y tenía que coincidir mi número de conteo con los tickets vendidos”, revela. Sus inicios en el periodismo fueron en gr fica y pasó 9 escribiendo e investigando casos policiales para Diario Popular y la agencia de noticias Télam. Luego saltó a la televisión pero el cambio fue progresivo: primero fue productor durante dos años de Ser urbano, el programa de Gastón Pauls por Telefe; luego pasó a Telenoche, TN y Radio Mitre a la par en !" empezó en C5N y en !# se pasó a $elefe, donde integra el panel de Cortá por Lozano y El noticiero de la gente. En lo personal, está felizmente casado con la fiscal Clarissa Antonini, con quien se conoció traba%ando all por ! & '(lari labura en el Poder Judicial y los dos nos gustamos desde que nos vimos. El amor se construye, no conozco a nadie que se enamore la primera vez. Tengo un excelente vínculo con sus hijos, Camila y Mariano, y soy abuelo de Luca por parte de Cami. Me gusta y me divierte ser abuelo; no me cierra la palabra abuelastro, prefiero decir que soy su abuelo& )e integré rápido a la familia y fue un cambio enorme en mi vida porque de estar soltero pasé a tener mujer con hijos y un nieto. Soy muy feliz con ellos”, cierra.