¿Qué son los “beacons”?
Son pequeños dispositivos de entre 5 y 15 cm de diámetro, que envían una señal a través de Bluetooth de bajo consumo que, a diferencia del tradicional, casi no consume batería. Cada beacon tiene un identificador único y su señal es recibida e interpretada por smartphones y tablets que deben tener una app instalada, y desde los que se puede descargar contenido –texto, imágenes o links– mediante Wi-Fi o 3G”, describe Ariel Díaz Ailán, cofundador de Notibeacon, firma proveedora de tecnología de microlocalización. Concretamente, sirven para localizar a personas dentro de un entorno cerrado –un negocio, un centro comercial, un club, etc.– donde la señal del GPS del móvil no opera normalmente. Esto permite enviar contenido a quienes están cerca, y personalizarlo según el lugar u otras variables. “Además, se pueden usar para obtener datos de comportamiento de quienes circulan por el espacio cercano. Por ejemplo, el tiempo de permanencia en una sala, de qué género y edades son la mayoría de los visitantes, o sus gustos. Casi un Google Analytics para entornos cerrados. Otra utilidad es guiar a una persona hasta un punto de interés, por ejemplo, adonde dejó estacionado su auto. En este caso, sería un Google Maps para interiores”, cuenta el experto. Y agrega: “Una implementación en una tienda involucra la ubicación de un beacon en cada área para enviar contenido sobre la oferta de ese sector. También se suelen ubicar en entradas y salidas, y estacionamientos. Otra opción es colocar un único beacon ya que es muy versátil y puede cambiar el contenido enviado según sea el dispositivo móvil que lo detecte, o el día u horario”.
Díaz Ailán explica que, además de los beacons, la implementación “incluye el desarrollo de una aplicación móvil que debe ser descargada por los usuarios, y una aplicación web que gestione la app y el envío de contenido. También es necesaria una campaña de marketing. Sin esto, hoy no hay otra forma de enviar el contenido y que sea bien recibido. En 2015, Google lanzó el protocolo Eddystone que probablemente en el futuro permita enviar información a tablets y smartphones y sin necesidad de una app”.
¿Y los costos? “En la Argentina, cada beacon cuesta aproximadamente $ 600. El desarrollo de la app puede demandar desde US$ 7.000 por sistema operativo (Android e iOS) y desde US$ 2.000 para crear la aplicación web. Y la colocación y configuración de 50 beacons puede costar US$ 3.000”.
Alicia Giorgetti
“Es muy importante tener un plan de marketing para impulsar a los clientes a descargar la app.”