Las pymes necesitan financiación accesible
Uno de los principales problemas que deben enfrentar las pymes es que no encuentran fuentes accesibles de financiamiento. Aun con las últimas bajas de la tasa de referencia del Banco Central, sigue existiendo un piso al costo del dinero imposible de sostener en el tiempo por parte de las pequeñas y medianas empresas. De este modo, para muchas de ellas la subsistencia se complica. El programa “Línea de Inversión Productiva”, que financiaba capital de trabajo y maquinarias a tasas del orden del 17% en pesos, finalizó el año pasado. También, en diciembre de 2017, terminaron los programas que permitían una reducción de tasas de hasta 6 puntos con fondos de la Sepyme.
Argentina es un país con mínimo acceso al crédito para las pymes, donde es más fácil obtener un crédito para consumo a nivel personal o familiar. El promedio de préstamos a pequeñas y medianas empresas, medidos en función del PBI,
“El programa de Línea de Inversión
Productiva, que financiaba capital de trabajo y maquinarias a tasas del orden del 17% anual, en pesos, finalizó el año pasado. También terminaron los programas que permitían una reducción de hasta 6 puntos en la tasa con fondos de la Sepyme”.
es de tan sólo el 12%. A modo de ejemplo, Perú está arriba del 30%, Colombia más del 50% y Brasil y Chile casi el 90%. Mientras que en Argentina solamente el 46% de los créditos se destina a empresas y el 41% a consumo, en Chile esa relación se corresponde con el 60% y el 12% respectivamente.
Por todo esto, es importante un programa de financiamiento para pymes que perdure en el tiempo, con tasas realistas que permitan el repago. Sólo 35% de las pymes accede a créditos bancarios y 55% realiza inversiones con capital propio, ralentizando así el proceso de crecimiento y la competitividad.
La idea de generar créditos UVA para las pymes, como recientemente anunciaron varios bancos podría ser una herramienta útil, en la medida que la inflación baje y esto permita tener una tasa de interés acotada.
La necesidad de bancarizar más la economía es innegable. Y dar mayor peso en los créditos a las pymes debería implementarse en el corto plazo. El Banco Central tendría que dirigir el crédito a las pymes en mayor proporción porque son estas unidades las que más dinamizan el empleo en la economía, brindando más del 70% de los puestos de trabajo del sector privado, motorizando el crecimiento de las economías regionales y la innovación productiva. Las pymes necesitan acceso a créditos a tasas razonables y esto no puede esperar. De lo contrario, se empantanarán las incipientes recuperación de la industria y el comercio que tuvieron lugar en el el segundo semestre de 2017.