Medicina a distancia: el negocio y un debate abierto.
Seis desarrollos locales de soluciones digitales efocadas en en el vínculo entre médicos, pacientes e instituciones. El debate abierto por los tratamientos a distancia. Por Jesica Rychter
La innovación en materia de servicios de salud, en particular aquellos que están enfocados en el vínculo entre pacientes y cuerpo médico, requiere de procesos de análisis y de experimentación diferentes a otros productos o servicios, ya que hay de por medio un tema de salud pública. Aun así, en los últimos años se generaron nuevos emprendimientos que permiten que los profesionales de la salud puedan acceder a soluciones digitales para el diagnóstico, seguimiento y tratamiento, que resultan innovadoras sobre todo en la escala: antes, sólo estaban disponibles para grandes estructuras.
Desde el lado de los pacientes, se puede mencionar una potencial demanda sin techo para servicios y soluciones que promuevan la autogestión administrativa, la reducción de los tiempos de espera y traslados y poder recibir atención médica en cualquier momento y lugar.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la recientemente publicada guía “Recomendaciones sobre intervenciones digitales para el fortalecimiento del sistema de salud”, el término salud digital se basa en la eSalud, que a su vez es definida como “el uso de la tecnología de la información y las comunicaciones en apoyo de la salud y los campos relacionados con la salud”. En este informe te presentamos seis desarrollos locales con diferentes niveles de complejidad, basados en la modalidad digital.
ENTORNO LÚDICO
Ricardo Ruival (45) y Guillermo Rodríguez (47) son Ingenieros de Sistemas recibidos de la Universidad Católica de Córdoba. Al terminar la facultad se juntaron en la casa de los padres de Ruival para desarrollar sistemas informáticos hasta formar la que hoy es la empresa GeminusQhom, la cual posee varias divisiones (desarrollos a medida, tercerización de RRHH, aplicaciones móviles y I+D+I). Desde esta última división, en 2015, lanzaron la plataforma de rehabilitación virtual MOTMI, hasta que dos años más tarde se formó como una sociedad separada.
“MOTMI fue pensada para ser utilizada para patologías neurológicas o traumatológicas, por lo que permite trabajar diferentes partes del cuerpo del paciente”, explica Ruival. Se trata de un software que utiliza sensores de detección y reconocimiento de movimientos dentro de un entorno lúdico. “De esta forma el profesional de la salud puede configurar un plan de rehabilitación para el paciente y este lo realiza como si estuviera jugando un videojuego, pero con una actividad diseñada en base a un objetivo terapéutico y registrando todo el proceso de trabajo en la nube, lo que hace que tenga una historia clínica digital automática”, detalla.
¿Cómo funcionan los sensores de movimiento? “Muchos son derivados de la industria del videojuego como es el caso del sensor Kinect, que cuenta con un par de cámaras y toma todo lo que hay adentro, identificando el cuerpo humano y digitalizándolo”, dice Ruival. “Luego nosotros armamos el avatar animado y lo metemos dentro del videojuego, entonces los movimientos que hace el paciente se reflejan en ese avatar en tiempo real. Así nosotros podemos saber si los movimientos que debe hacer, según un plan de rehabilitación, los hace bien o mal. Podemos controlar todo y luego queda registrado en la nube para un posterior análisis”.
Según Ruival la inversión total “ronda los USD 300.000 dólares”, parte de fondos propios y otra parte de un subsidio a través del programa FONSOFT. “Luego fuimos recibidos por Incubando Salud, entidad formada por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y la fundación Barceló”, comenta. De acuerdo al emprendedor, MOTMI es utilizada en centros de rehabilitación y en los hogares de los pacientes –necesitan tener una computadora, televisión y los sensores de movimientos necesariosbajo la supervisión de un profesional de la salud. “Actualmente es usado por más de 30 entidades en Argentina y ya contamos con instalaciones en Chile”, comenta. Además recibieron muchos reconocimientos: “Primer premio en proyecto de innovación 2015 en los Premios Sadosky a la Industria Argentina de Software; finalista en el programa Incubando Salud 2016; Mención especial a la Innovación Industrial 2017 del Gobierno de la Provincia de Córdoba; finalista en los premios Everis 2018 y finalista en Novartis Innovation Week 2018”, enumera Ruival.
En la actualidad en Geminus
Qhom trabajan 19 profesionales y en MOTMI, seis. Cuentan con presencia física en Buenos Aires y Córdoba, desde donde atienden a todo el país y tienen personal con experiencia en desarrollo de videojuegos, software empresarial, gestión de soluciones basadas en la nube, desarrollos electrónicos, ingeniería biomédica y kinesiología. “El corazón de la empresa está basado en el desarrollo tecnológico, lo que hace que podamos incorporar mejoras en forma permanente y a un ritmo veloz”, dice Ruival.
AGENDA ONLINE
Jorge Nasanovsky (51) es médico pediatra y hace 20 años que también desarrolla plataformas de software orientadas a la salud. Su primer proyecto en Internet se llamó Zona Pediátrica. En 2012 empezó a darle forma a Citaldoc, su actual emprendimiento del cual es el COO. “Notaba que en mi consultorio la agenda de papel mostraba un 30% de ausentismo en los turnos, cuando indagaba a los padres de mis pacientes me decían que se olvidaban de la cita o que no asumían el turno solicitado como un compromiso”, recuerda.
Ese fue el puntapié para crear una plataforma que, inicialmente, permitiera solicitar turnos médicos en línea y un sistema de recordatorios. Contó con una inversión inicial de US$50.000, la mitad aportada por fondos propios con sus socios y la otra por la aceleradora NXTP Labs. Luego se incorporaron inversores privados que los apoyan en el desarrollo de nuevas funcionalidades del sistema y de marketing.
En una segunda instancia, Nasa
“Luego de las sesiones de kinesiología, el paciente podrá complementar la rehabilitación en su casa”.
sumó la posibilidad de que los pacientes realicen consultas a distancia, a través de videollamadas o chats de texto. “Eso disminuye gastos de traslado y tiempos de espera. Desde el punto de vista del profesional, muchas veces por viajes tiene que ausentarse del consultorio. Nosotros damos una respuesta a ambas necesidades”, dice. A su vez, la plataforma permite el envío y recepción de documentos o imágenes. “Si es un medicamento que requiere de prescripción con firma y sello del profesional debe concurrir al consultorio, estamos a la espera de la ley que autorice la receta electrónica para evitar ese paso”, aclara. El modelo de negocio, dice, no consiste en cobrar al médico. “No abona ningún cargo mensual ni anual, nosotros no le descontamos nada. El servicio es pagado a través de un pequeño fee al paciente”, resalta Nasanovsky, quien trabaja con otra médica pediatra, Mercedes Ruggeri, y el CEO Rodolfo Civale, quien proviene de la industria farmacéutica. Nasanovsky asegura que son muy “estrictos” con la seguridad de los datos: “Las video consultas no se graban y los textos de chat se eliminan del servidor en un rango de siete días de terminada la consulta, con la posibilidad de descargar el contenido y guardarlo en la historia clínica”. Afirma que Citaldoc cuenta con 800 profesionales registrados al sistema de agenda online y 170 que brindan consultas en línea. “Brindamos más de 250.000 turnos de atención anuales, contamos con más de 70.000 pacientes regisnovsky trados. Las teleconsultas comenzaron hace seis meses y ya se realizaron más de 300 orientaciones a distancia”, agrega.
CONSULTORIO MÓVIL
Santiago Troncar (48) es Contador Público (UBA), tuvo dos emprendimientos propios en el mundo digital y luego fue parte del management team de El Sitio y de Ticketek Argentina. ConsultorioMOVIL surgió como idea en 2014: “En esa época había algunos sistemas de historia clínica digital y sistemas de turnos online, pero nadie aún pensaba en digitalizar la relación médico-paciente y ofrecerle al médico una solución completa para su consultorio”, cuenta. La plataforma fue lanzada un año más tarde, con una inversión de US$ $800.000 entre cinco
cofundadores y otros inversores.
Troncar explica cómo funciona Consultorio MOVIL: “El médico atiende al paciente la primera vez en su consultorio y le ofrece al paciente una app desde donde este puede sacar turnos futuros, recibir sus indicaciones, mensajearse, pagarle una consulta online, compartir estudios o imágenes e informarse. El médico, por su lado, lleva su agenda de turnos, la historia clínica de sus pacientes en su móvil, la posibilidad de atenderlos en cualquier momento y lugar. O, eventualmente, de enviarle materiales educativos para su salud”.
Como el primer encuentro se realiza de forma física en el consultorio, el paciente valida en la plataforma que está siendo atendido por el médico que eligió. “No recomendamos ni promovemos que un paciente sea atendido por primera vez desde un dispositivo digital. Creemos que un primer encuentro personal médico-paciente es clave. Después de esta primera visita, el médico determinará qué consultas pueden ser vehiculizadas a través del medio digital y cuáles demandan un encuentro presencial”, aclara.
Troncar dice que el emprendimiento tiene un modelo “freemium”, gratuito para médicos y pacientes, que consiste en el sistema de turnos, historia clínica online y app mobile para pacientes. La versión Premium paga para el médico es más completa: cuenta con cobros online a pacientes, biblioteca digital para pacientes, red digital de colegas para hacer interconsultas y la personalización de fichas clínicas, entre otras. “Gracias al apoyo de los sponsors logramos que muchos médicos e integrantes
“El médico siempre atiende al paciente por primera vez en forma personal. La app sigue después”.
“Una alternativa es cuando un médico revisa a un paciente y consulta online a otro médico. Pero no que el paciente esté solo frente a un aparato”.
de sociedades médicas accedan a la versión Premium”, comenta Troncar. El emprendimiento fue lanzado también en México y Chile. Dice que son un “pequeño” equipo de trabajo, compuesto por profesionales médicos, tecnológicos, de marketing y comerciales, que trabajan desde sus oficinas de Pilar. “Más de 8.000 médicos especialistas se han registrado en la plataforma”.
FUERA DE LA CAJA
Federico Pedernera (43) es médico, integrante de la primera camada que realizó una residencia en Sistemas de Información en el Hospital Italiano de Buenos Aires. Cuenta que en aquellos años, los médicos no podían acceder a soluciones tecnológicas. “Eran pocas y carísimas, estaban pensadas para organizaciones y tenían el foco puesto en procesos administrativos y no clínicos”, dice.
Pedernera destaca que el disparador de su emprendimiento, Epicrisis, fue cuando accedió en
2004 al correo electrónico Gmail, por entonces en versión beta. “Los correos no se borraban y entendí que todo iba a estar en la nube. Se podía almacenar información y eventos transaccionales sin la necesidad de tener un software y servidores en un consultorio”.
Junto con un especialista informático, Sebastián Ciancio, y un médico, Alejandro López Osornio, para 2010 había desarrollado su propia versión beta de Epicrisis, que lanzaron al público un año más tarde. “Es una plataforma que te permite visualizar un consultorio, con foco en procesos asistenciales y clínicos, como conocer al paciente, registrar las atenciones y gestionar la información”, dice Pedernera. “Está pensada desde el lugar del médico que conoce los problemas y necesidades en la interacción entre profesionales y pacientes, pero con la ventaja de pensar ´fuera de la caja’. Es de acceso libre y gratuito, en formato trial. Superado ese límite, cobra un servicio mensual.
La plataforma obtuvo como reconocimientos la Primera Generación de Wayra Argentina (2012), Desafío Intel Argentina 2012 (finalistas a nivel mundial) y la participación en el programa Start-Up Chile en
2014. Pedernera afirma que tienen “más de 2.000 usuarios activos” que, detalla, agrupan a “cientos de miles de pacientes con registros clínicos y miles de citas gestionadas por mes”.
Los usuarios son de México, Chile, Colombia, Costa Rica, Bolivia, Uruguay y Argentina principalmente. Pedernera, además, se desempeña como consultor en la secretaría de Salud de la Nación, “para la construcción de la Agenda de Salud Digital de Argentina”.
POST REHABILITACIÓN
Matías Morsa (22) es estudiante de la carrera Ingeniería de Sistemas de la UTN. Junto con su compañero de estudio en la secundaria ORT, Ignacio Cozza (23) y su padre Marcelo Cozza (56), comenzaron a explorar las tecnologías inmersivas (realidad virtual y aumentada) con un proyecto llamado SpaceEd, “un juego creado para enseñar el sistema solar a chicos con capacidades especiales”, cuenta. Fue gracias a este trabajo que vieron el potencial de esta tecnología y decidieron empezar con el emprendimiento “Rehabilitación Aumentada”, desarrollo dentro de su empresa
llamada Virtual Dot, “en un área sin explotar como lo es la rehabilitación músculo-esquelética, para convertirla en una experiencia entretenida y estimulante”.
Morsa asegura que el objetivo no es reemplazar la rehabilitación tradicional sino complementarla. Luego de las sesiones de kinesiología, el paciente podrá cumplir con la rehabilitación cuando llega a su casa. “Conectará el celular a una televisión mediante un adaptador que le proveeremos y nuestro software reconocerá su cuerpo mediante la cámara para luego continuar el tratamiento mediante juegos inmersivos. También promoveremos que continúe el tratamiento una vez terminadas las sesiones”, comenta.
Al principio utilizaron ahorros propios para financiarse y, en diciembre del año pasado, ganaron el concurso Potenciate del Gobierno de la Ciudad de Buenos, que les otorgó un capital semilla de $200.000. Actualmente están participando de Incubate, incubadora del Gobierno porteño.
“Inicialmente el proyecto utilizaba realidad virtual, pero a partir de un análisis de mercado vimos que la barrera de entrada era muy alta, tanto económica como cultural. Por eso decidimos usar realidad aumentada, ya que permite crear un producto masivo de alto impacto”, explica Morsa, quien se desempeña como CMO. Recientemente finalizaron la etapa de investigación de Rehabilitación Aumentada. “Ya hemos comenzado con el desarrollo del producto mínimo viable, para poder empezar a hacer pruebas con pacientes reales y seguir validando nuestro producto. No tenemos fecha de lanzamiento pero apuntamos a estar haciendo pruebas con pacientes en 2020”, menciona.
APTO FÍSICO
Diego Pilliavsky tiene 37 años y hace 15 es Director Comercial en Pisol, empresa de desarrollo web y marketing digital. El puntapié para crear Didi.fit junto con su socio, Ezequiel Naftali, fue su interés por el running y el requisito de presentar un apto médico en las carreras. “Me di cuenta que había una oportunidad para simplificar un proceso que es engorroso para todas las partes, pero que es necesario”, comenta. El proceso del cual hace referencia es la digitalización del apto médico, para usarlo “libremente” en la red de asociados. “El objetivo es que la persona se olvide por un año de los papeles y cuando quiera ir al gimnasio o a correr una carrera no tenga que preocuparse por sacarle fotocopias y llevar el papel”, dice.
El emprendimiento fue lanzado en 2018, tras una inversión de
US$ 100.000, afirma Pilliavsky.
“La persona se registra en la app y descarga un apto médico para llevarlo a su médico. Se hace los chequeos y, una vez firmado, lo sube a la app, paga un fee anual y nosotros lo validamos. A partir de ese momento ya le queda para usar mientras el apto esté vigente en nuestra red”, explica. Por el momento tienen entidades asociadas y están trabajando para desarrollar nuevas alianzas.
Si el usuario sube un apto médico que no es el modelo de Didi.fit se analiza y, dependiendo del contenido, es aceptado o no. De acuerdo al emprendedor, verifican en la base de datos del Sistema Integrado de Información Sanitaria Argentino (SISA) tanto la matrícula del profesional como su sello. También aclara que la entidad asociada sólo tiene acceso a los datos de las personas que se presentan. “La persona recibe una alerta de la app notificándole que el asociado lo vinculó a un evento dado. Por cuestiones de privacidad y seguridad de la información, los asociados nunca acceden a la base de datos completa”, explica. Agrega que ya han sido parte de la Maratón de Buenos Aires y el
Paz.•
Triatlón Olímpico de La