Sustitución de importaciones: 12 casos
Doce empresas que desarrollan partes y productos como alternativa a la oferta proveniente del exterior. En muchos casos, con un alto componente de valor agregado.
Algunas lo vienen haciendo desde hace décadas. Pero la mayor parte de los desarrollos actuales fueron en plena pandemia.
Sse suele pensar que los procesos sustitutivos sólo se aplican cuando se cumplen ciertas condiciones económicas, como la depreciación del peso o restricciones cambiarias. Y que como requieren inversiones, exigen que haya financiamiento blando de mediano o largo plazo, o un adecuado nivel de utilidades para reinvertir.
Pero en la práctica los límites son difusos. Hay casos de sustitución de importaciones en ausencia de esas condiciones o en presencia de una sola. Y en la mayoría de los casos las pymes son protagonistas de esos procesos. Lo hacen animadas por el afán de crecer, ganar cuotas de mercado a través de fórmulas de innovación y diferenciación de lo conocido.
De esto da cuenta la presente nota, con una serie de casos paradigmáticos de la vocación sustitutiva de las pymes locales. Muchos de esos procesos comenzaron o tuvieron su impulso en plena pandemia. Pero a lo largo de los 12 casos relevados predominan las historias de compañías que durante décadas han sabido encontrar nichos de mercado para posicionarse como una alternativa local a la oferta importada: Interlaken (desde los años ‘80), Ruibal (la última década), Sinteplast (desde 1970), Metalcrom (fines de los ‘60), Industrias KMG (desde hace 15 años). La lista no se detiene ahí: Globos Tuky (sobrevivientes de los ‘90), Dinatécnica (desde 1967), Probattery (desde 2001), Metalúrgica C&G (280 productos en ochos posiciones arancelarias, a lo largo de 75 años), Chiuchich (en la última década), así como los más recientes Algaebio+ y Bullet Stopper. Todas, ofrecen desarrollos locales como alternativa.
Jorge Vasconcelos, investigador jefe de IERAL-Fundación Mediterránea puso el acento no sólo en la resiliencia de estas empresas, algunas casi centenarias, sino en el valor agregado de sus desarrollos. “La mayoría han logrado nichos de valor agregado en etapas intermedias de la cadena de valor, un concepto que habla por sí mismo, dada la carga de valor agregado que implica”, señala en la columna que acompaña este informe.•