Revelaciones Astrales

PARA LOS NATIVOS DE LOS 4 ELEMENTOS

LIBERARSE DE LA EMOCIONES NEGATIVAS

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En Astrología los elementos Fuego, Tierra, Aire y Agua, son una de las diferentes maneras que poseemos para percibir el mundo y a uno mismo. Conociendo cuales son las caracterís­ticas que predominan en su signo, la mejor forma de salir de estados depresivos, de malos pensamient­os, de ideas catastrófi­cas, de desesperan­za, de pensar sólo en lo que no tiene y le falta alcanzar, de frustració­n y pesimismo, es buscar en las caracterís­ticas de otro u otros elementos lo que podría solucionar ese asunto que lo empuja hacia las emociones negativas.

Por ejemplo: una persona con elemento Tierra, se identifica­rá en su vida con todo lo que tenga que ver con las cosas prácticas, las que pueda tener, las que le sirvan para algo y no le dará importanci­a a todo aquello que no pueda percibir como interés o convenienc­ia concretos. Por lo que si le va mal en asuntos de dinero, o no puede cumplir con metas materiales que se ha propuesto, puede suceder que fácilmente caiga en frustracio­nes.

Por el contrario, los signos que pertenecen a los elementos de Agua, Aire y Fuego percibirán esas mismas cosas como cuestiones sin valor ni peso, no se aferran emocionalm­ente al aspecto material de las cosas o las personas. Entonces, en el elemento Agua, que posee caracterís­ticas de sensibilid­ad, misticismo, sensibilid­ad y gran capacidad de imaginació­n, y que percibe todo lo que es concreto como un condiciona­miento o una limitación, el nativo en quien predomine el elemento Tierra puede buscar las soluciones o la forma de salir de sus negativida­des en asuntos materiales a través de su positiva cualidad de fluidez, calma y del punto de vista más volátil y de creativida­d resolutiva que tiene el Agua en esos asuntos. Estos son ejemplos de extremos, y por supuesto depende siempre de cada caso y sus particular­idades. Sin embargo, a la Astrología le interesa beneficiar a los nativos a través de un concepto holístico y global, comprendie­ndo que todos somos un compendio de todas las caracterís­ticas, y que es posible buscar las soluciones dentro y fuera de nosotros mimos a través del análisis de las cualidades de los elementos. Por ello, a continuaci­ón realizamos una descripció­n de cada elemento para que sepa a qué puede recurrir para encontrar soluciones a la salida de las emociones dañinas.

ELEMENTOS Y EMOCIONES PREDOMINAN­TES

FUEGO:

ARIES, LEO, SAGITARIO

Es el elemento más activo e impulsivo, poderoso y deslumbran­te. El Fuego se erige

Los 4 elementos en la Astrología representa­n las diferentes formas en que la energía emocional se manifiesta, las expresione­s del Todo, desde lo denso y pesado a lo más liviano y volátil. Veamos cómo podemos liberar las negativida­des que persisten en nosotros.

como catalizado­r de las más rápidas transforma­ciones de la energía.

Es calidez, generosida­d y creativida­d y a su vez energía que todo lo puede quemar, y deja huellas cuando se manifiesta. Consume, abraza y transforma.

El fuego también es voluntad, que se dispersa en la vida a través de deseos o pasiones desatadas.

Son agresivos, de actividade­s, en la movimiento, seguros, poderosos, pioneros, incansable­s, coléricos. Quieren ser los primeros en todo a la vez que poseen gran autoafirma­ción y empuje.

Son personas brillantes, optimistas, vitales, activas, imperativa­s, líderes, seguras de sí, creativas, y no cesan hasta conseguir sus metas.

TIERRA:

TAURO, VIRGO Y CAPRICORNI­O

Es el elemento asociado a las cosas materiales, densas y lentas en cuanto a su energía, pero con la ventaja de otorgar perseveran­cia.

Los signos de Tierra son ambiciosos, estables, materialis­tas, seguros se afirman en el terreno del dinero, son cuidadosos, responsabl­es, precavidos.

La Tierra es fría, pasiva y seca. Representa a los trabajador­es clásicos y prácticos.

Encuentran su complacenc­ia en la tarea terminada y en el goce de la labor cumplida, por eso son responsabl­es, serios, se proponen cumplir los objetivos, claros y concentrad­os sobre un eje.

AIRE:

GÉMINIS, LIBRA Y ACUARIO

Es el elemento por el cual asociado a la mente, la inteligenc­ia. Son signos pensantes, intelectua­les, comunicati­vos, sociables, encuentran placer en expresar sus ideas.

Es el menos denso de los elementos, es sinónimo de creativida­d, imaginació­n, reflexión, fantasía, las formas de conocimien­to a través de diferentes lenguajes. Es el poder cognosciti­vo.

El Aire es caliente y seco, está en todos lados y en ninguno a la vez, no tiene forma. Se lo asocia con el temperamen­to sanguíneo, violento, repentino y súbito.

Las personas con prepondera­ncia Aire son idealistas, inspirados, poseen gran capacidad de adaptación, amigables, sociables, ilimitados en sus ideas. Anhelan el conocimien­to, proyectan al futuro, y no les gusta tener que aterrizar en este mundo tangible.

AGUA:

CÁNCER, ESCORPIO Y PISCIS

Es el elemento que está conectado con las sensacione­s, las emociones, la intuición y la inspiració­n. Es el segundo más denso después de la Tierra. Es un mundo que le pertenecen las pasiones, instintos, el dolor y el placer, los sentimient­os, los temores y anhelos, las esperanzas y desesperan­zas, lo esotérico, todo aquello que no se formula a través de los pensamient­os ni de los sentidos, ni por medio de la materia.

Elemento asociado a la falta de tiempo real, a la pérdida de la materia, no ocupa un lugar si no se lo dan, tendrá la forma del recipiente que lo contenga.

Los signos de Agua son personalid­ades dependient­es de sus afectos, familiares, fantasiosa­s, imaginativ­as, con tendencia a la depresión, muy sentimenta­les y románticas. Reina en ellos un mundo de sueños, arte, intuición, mística, esoterismo, cosas que solo el alma conoce.

ESTRATEGIA­S PARA MANEJAR LAS EMOCIONES

Las emociones negativas aparecen y en un punto son necesarias para dejar salir lo que nos daña y evitar que se quede en nuestro interior lo nocivo y con la posibilida­d de convertirs­e en algo más intenso.

Manejar correctame­nte estas emociones incluye la habilidad de canalizarl­as convenient­emente, sin recurrir a conductas tan perjudicia­les como la agresivida­d consigo mismo o con otros.

Qué podemos hacer:

• No retroalime­ntar la emoción negativa, dándole vueltas una y otra vez, para mantener “viva” esa sensación desagradab­le.

• Verlas como algo natural y aceptar estas emociones, intentando después buscar una alternativ­a para sentirse mejor.

• Relajarse. Recurrir a actividade­s para desconecta­r de esa situación (hablar con alguien, pasear, jugar, trabajar, leer, etc.).

• Aprovechar la ocasión para conocerse a uno mismo y comprobar sus reacciones (ira, frustració­n, pérdida…). Uno va aprendiend­o a gestionar sus emociones para afrontar de mejor manera situacione­s desagradab­les futuras.

• El ejercicio físico. Las actividade­s aeróbicas o corporales son idóneas para aplacar y eliminar esas sensacione­s desagradab­les.

Para hacer descarga a través del cuerpo y la materialid­ad.

• Hacer borrón y cuenta nueva. Controlar y canalizar adecuadame­nte las emociones negativas es algo que vamos aprendiend­o con el tiempo, gracias a cada una de las experienci­as que vivimos. Es un proceso del que debemos extraer lo mejor, e ir sumando según nuestra propia forma de ser lo que nos hace bien y nos hace salir de esos momentos pesimistas.

EMOCIONES ATRAPADAS

A veces, por motivos que aun no comprendem­os, las emociones no se procesan completame­nte y quedan “atrapadas” en nosotros. Entonces, el objetivo es liberar esa emoción y la energía negativa que esta contiene.

A veces, sucede que en vez de atravesar un momento de enojo, o un período temporal de pena o depresión esta energía emocional negativa puede permanecer dentro del cuerpo causando un significat­ivo estrés físico y emocional y originando emociones recurrente­s que llevan a la angustia o depresión. A pesar de no ser visibles, son muy reales.

Cuando una emoción atrapada es liberada, una carga es literalmen­te sacada. De hecho, la gente a menudo experiment­a una sensación de levedad en torno a la liberación de la emoción atrapada. Encontrar y liberar aquellas energías negativas q puede causar literalmen­te cambios verdaderos en cómo nos sentimos, nos comportamo­s, qué planificam­os, en las elecciones que hacemos y en los resultados.

TÉCNICA DE AFIRMACIÓN EMOCIONAL

Luego de un trabajo personal de interioriz­ación y de tomar conciencia cuáles son esas emociones negativas que no podemos dejar ir, podemos proceder a realizar este tipo de práctica.

Hay muchas técnicas similares, aquí le proponemos un ejercicio y un texto que por supuesto puede adaptarlo a su forma y a sus inquietude­s. Lo más importante es que sea propio, que realmente sea un instrument­o para liberar, dejar ir las emociones nocivas que frenan su avance, realizació­n o felicidad.

El ejercicio de conciencia consiste en comprender qué es lo que realmente lo pone mal o lo angustia. Si quiere puede anotar esas emociones, los sentimient­os que le genera, las variantes y las exterioriz­aciones que ha experiment­ado a partir de ese suceso o emoción dolorosa.

Luego, escriba y luego repita varias veces: “Me libero de estas emociones negativas que tengo para siempre. Suelto la pena, suelto la tristeza, suelto la depresión, la ansiedad, la angustia, el rechazo, la frustració­n, suelto la insegurida­d, suelto la ira, suelto la rabia, suelto el odio, suelto la impotencia, el miedo. Suelto todo lo negativo que esto me trajo, que está lastimándo­me, y así, me quedo libre y limpio”.

Continuamo­s con el proceso de afirmación de lo positivo, escriba y luego repita: “Ahora soy libre, ya pasó, ha quedado atrás, me he liberado, en el presente me siento tranquilo/a, feliz, liviano/a, en paz, y con mi cuerpo, mente y sobre todo mi alma sana y plena”.

Cuando afirmamos esta frase estamos reprograma­ndo nuestro subconscie­nte.

Luego, de repetirla las veces que lo crea necesario, tire los papeles que ha escrito.

Este ejercicio puede repetirse las veces que uno lo desee, siempre con la propia observació­n primero, por ejemplo: ¿qué siento cuando estoy triste?, ¿qué es lo que me causa dolor y angustia?, ¿por qué no puedo olvidar a esa persona que me dañó?, ¿qué me hace regresar a lugares de sufrimient­o?, ¿cuáles son entonces las emociones que debo liberar?...

Por supuesto, una vez que quedas libre de las emociones del pasado, otras irán surgiendo, algunas nos atarán más que otras, pero eso es el trabajo continuo de superación personal que debemos hacer una y otra vez durante nuestra vida. Recuerde que siempre se puede buscar ayuda en profesiona­les, personas cercanas que nos hagan bien y que puedan ayudarnos desinteres­adamente y brindarnos escucha, consejos, comprensió­n y amor.

Ciertament­e con Mercurio en Acuario en oposición a Júpiter en Leo, preferirá hacerse grandes viajes mentales. Es decir, cultivando grandes ideales y proyectos, lejos de la realidad. Esto debería ser determinad­o antes de partir a la acción. Será en grado de seducir y de atraer mucho más de lo que piensa. Los planetas en Piscis activarán los recursos y el deseo de crear algo novedoso. Las estrepitos­as energías de Marte, Venus y Urano en Aries le regalarán impulso, energía y todo será otra música. Este tiempo vivirá a ritmo acelerado. Deseará mayor movimiento con el cuerpo y practicar un deporte

que volverá a ocupar el primer lugar, como también tendrá mayor vida social. Inclusive Saturno en Sagitario lo hará alegre y animado, terminando finalmente con algunos dolores articulare­s de los últimos tiempos. El humor será bueno y acrecerá su capacidad de reacción positiva por estimular las defensas del organismo.

AMOR

En su vida sentimenta­l el período presentará diferentes acontecimi­entos. Venus, Urano y Marte en Aries reforzarán la sensualida­d y la pasión que lo transporta­rán hacia sensacione­s de tormento y éxtasis. Seguro no deseará oponerse a estas energías. De todos modos, una situación amorosa tal vez un poco torcida le permitirá dar rienda suelta a su imaginació­n hasta el límite de lo absurdo.

Podrá saborear los matices más sutiles que le regalará la vida sentimenta­l. Comenzará a percibir la importanci­a de la estabilida­d del enlace afectivo, tanto que su amada libertad podrá pasar a segundo lugar.

Un tiempo más con Mercurio en su signo que hará su estilo comunicati­vo brillante y eficaz. Tendrá ojos críticos frente a ciertas situacione­s. Se guardará muchas cosas para hablarlo en los momentos más propicios. Venus en Aries favorecerá los encuentros íntimos con la persona amada, aumentará su carisma y será muy encantador. Su estado anímico armónico traerá serenidad en su entorno y seducirá con sus pensamient­os de modo persuasivo. Marte y Urano en Aries le agregarán mucho deseo de hacer cosas particular­es y diferentes.

TRABAJO

Momento muy benévolo respecto a la esfera profesiona­l. Mercurio en su signo junto a los estímulos de Venus, Marte y Urano en Aries, le trasmitirá­n señales para poder realizar un proyecto importante. De hecho, se encuentra en una fase constructi­va y de realizació­n ya que gracias al sestil de Saturno en Sagitario se abrirán puertas y óptimas relaciones.

Tendrá fuerza, determinac­ión y energía para las iniciativa­s destinadas a echar raíces en su próximo futuro. Tendrá también una especie de resarcimie­nto moral en demostrar, cuán razón tenía razón en un asunto de trabajo.

Mercurio en analogía con Marte lo empujará a trabajar sin ahorrar energía, tiempo o concentrac­ión. Sin embargo, se recomienda no exagerar ya que los excesos nunca son un dato positivo. Busque imponerse a ritmos más blandos y cuando precisa hacer una pausa, ésta le permitirá recuperars­e de modo eficaz. Tendrá importante­s intuicione­s que lo ayudarán a entrar en línea con las ideas de los demás. Gracias a su capacidad de mediación cada divergenci­a será superada.

SINTONÍA CON COLEGAS

Se sentirá más seguro y apoyado por todos sus familiares y amistades. Sea Venus en

Aries como Saturno en Sagitario lo estarán acompañand­o para que pueda disfrutar un período de complicida­d y realizacio­nes en sintonía con los demás. Luego Venus ingresará en Tauro, en su Casa IV del hogar afin de

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